Revilla: «La idea inicial era un disparate»

Horas antes de que el Gobierno central rectificara su primer acuerdo sobre las salidas de los niños, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, criticaba con dureza la decisión de que sólo pudieran ir, junto a un adulto, a la compra. «Es un disparate», afirmó. «Ante este plan, yo, niño, preferiría quedarme en casa», argumentó. «¡Qué disparate!», reiteraba Revilla en un vídeo que difundió en sus redes sociales ayer después de que la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, anunciara las condiciones iniciales en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.

En el vídeo, el presidente cántabro destacaba que fue «uno de los primeros» en reivindicar que los niños debieran ser las primeras personas en salir del confinamiento, pero aclaró que se refería a que «salieran a pasear, acompañando a padres a las calles y a zonas verdes, respetando distancias». Por el contrario, lamentaba que «meterlos en la aglomeración de un supermercado o de una farmacia no tiene lógica, es meterlos en un avispero», ya que los niños «son los más inmunes al contagio, pero sí son transmisores».

Así, Revilla llegó a preguntarse «quién asesora al Gobierno» para tomar este tipo de medidas y acompañó la publicación del vídeo con el mensaje «así no», con el que también concluía su declaración.

La medida anunciada por el Gobierno recibió numerosas críticas a lo largo del día por parte de partidos políticos, padres, psicólogos y organizaciones dedicadas a la infancia, que también criticaron que sólo se permita a los niños salir para ir a comprar en lugar de pasear. Horas después, el Gobierno de Pedro Sánchez rectificaba.