La variante Ómicron ya está en Cantabria: hay dos casos confirmados y otros 17 sospechosos

Los dos casos confirmados no están relacionados entre sí. «Se trata de dos mujeres, vacunadas, que no presentan síntomas graves y que se encuentran en aislamiento», según indicó el director general de Salud Pública, Reinhard Wallmann. Una de ellas ha generado un contagio secundario y la otra pertenece a un brote que afecta a otras siete personas (sus muestras están en proceso de análisis) que han participado en un evento social común. Pero aparte de estos, constan otros nueve positivos sospechosos de estar causados por Ómicron, correspondientes a seis agrupaciones distintas de casos, «también en su mayoría relacionados con viajes a Madrid».

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Desde Sanidad cuentan con que el escenario de futuro sea muy similar al experimentado en Reino Unido, donde la variante Ómicron se está imponiendo de forma vertiginosa a Delta, la cepa dominante también en Cantabria desde este verano. De esta nueva cepa se sabe que presenta más de 30 mutaciones en la proteína S o espícula, algunas de las cuales se han asociado a mayor transmisibilidad o escape a la respuesta inmunitaria. Traducido: más probabilidad de contagio, incluso entre vacunados. «Con esta configuración, el virus está consiguiendo tener otra vez a una parte de la población susceptible de infección», explica Wallmann. Y se confía en que la vacuna de refuerzo sirva de muro de contención. «Quienes han recibido ya la tercera dosis tienen un nivel de anticuerpos que probablemente también sea efectivo contra Ómicron», añade. Es por eso que el reto de Sanidad es desplegar las inyecciones adicionales, centradas ahora en la población mayor de 60 años y en personal sanitario y sociosanitario, antes de que Ómicron gane terreno.

La preocupación de las autoridades sanitarias es que esa explosión de casos coincida con la época de mayor interacción social del año: las Navidades. El propio Ministerio apunta que «el impacto puede ser alto si llega a expandirse ampliamente en la población».

La Organización Mundial de Salud ha apuntado que Ómicron, presente ya en 63 países, «probablemente superará por ritmo a la variante Delta donde haya transmisión comunitaria». Los técnicos de la OMS insisten en que «aunque los resultados preliminares de Sudáfrica sugieren que Ómicron puede ser menos grave que Delta, y todos los casos notificados en Europa hasta la fecha han sido leves o asintomáticos, sigue sin estar claro hasta qué punto puede ser intrínsecamente menos virulento. Se necesitan más datos para comprender el perfil de gravedad».