Cantabria activa la fase de preemergencia del Plan Especial de Inundaciones

Tanta agua ha caído esta noche que el talud de Reina Victoria ha sufrido un importante desprendimiento de tierra y piedras, que han caído sobre la ya maltrecha playa de Los Peligros, afectada por la pérdida de arena tras los últimos temporales marítimos.

Y como este jueves va a seguir lloviendo y ademas Aemet prevé vientos del sur que pueden provocar el deshielo de la nieve caída estos últimos días en la cordillera, el Gobierno de Cantabria ha activado la fase de preemergencia del Plan Especial de Protección Civil ante Riesgo de Inundaciones.

A partir de este momento, los técnicos de la Dirección General de Interior y el Centro de Atención de Emergencias 112, realizarán un seguimiento permanente de la situación y comunicarán toda la información relevante a los ayuntamientos afectados, así como a los servicios de emergencia que pudieran verse involucrados y a la población potencialmente afectada.

A los ciudadanos de las localidades que potencialmente pueden sufrir inundaciones, se les recomienda encarecidamente que extremen las precauciones y que adopten medidas de autoprotección personal para evitar riesgos.

El Gobierno de Cantabria, que considera que son incidencias «normales y habituales por las intensas lluvias», ha trabajado estos días (servicio diurno y nocturno) para restablecer la seguridad vial y ofrecer vías alternativas para mantener la circulación en los diferentes puntos. En total, seis carreteras de la red autonómica están cortadas o con problemas de circulación por argayos o inundaciones:

La nieve mantiene cortados al tráfico los puertos de Lunada y Estacas de Trueba y, además, son obligatorias las cadenas o los neumáticos de invierno para pasar por el puerto de La Sía, donde ya lo tienen prohibido los camiones o vehículos articulados, al igual que la N-621 en el puerto de San Glorio.

Las trombas de agua están provocando argayos en numerosos puntos de la red viaria, según informa el 112. En Cabezón de la Sal, hay un carril afectado por un desprendimiento en la N-634 (km. 248), justo a la altura de Textil Santanderina. No invade en exceso la carretera, ya que las mallas protectoras y los árboles han logrado frenar el desprendimiento.

En Ruente ha caído una piedra de gran tamaño que ocupa los dos carriles de la carretera CA-180 (km. 8); otro argayo afecta a un carril en Ribamontán al Monte (CA-455, km. 11,5); otra piedra de gran tamaño ha caído en la N-635 en Medio Cudeyo (km. 13); y también hay una importante balsa de agua en Arnuero (CA-449).

Además, según informa Irene Bajo, un argayo de gran tamaño impide circular por la CA-265 (km. 12), que une los municipios de Arredondo y Soba. La roca, caída durante la noche, ha causado importantes destrozos en la vía que han obligado a cerrar al tráfico el tramo que se ha visto afectado, ubicado en la zona conocida como El Becerral. Esta carretera da acceso desde Arredondo al Parque Natural Collados del Asón y a La Gándara, donde se ubica el Centro de Interpretación y recepción de visitantes del Parque.

Según explicó el alcalde de Soba, Julián Fuentecilla, la piedra, de gran tamaño, impactó anoche en la calzada y se precipitó hacia abajo, causando daños en el vial que impiden la circulación por el mismo en un tramo de unos 50 metros de carretera, de tal manera que esta zona «tendrá que estar cortada hasta que se repare». La roca cayó en el punto kilométrico 12, cercano a la finalización del vial y del cruce con las carreteras que van a La Gándara y al puerto de La Sía.

Mientras la Consejería de Obras Públicas repara el acceso, el Ayuntamiento ha planteado el arreglo de un camino alternativo para facilitar el trabajo a los ganaderos de la zona y permitir también el tránsito de vecinos y visitantes desde Arredondo. «Se trata de camino que está con todo uno y tiene un tramo de unos 200 metros que está bastante mal, por lo que tenemos que adecuarlo», ha indicado el alcalde.

Si bien la carretera ha quedado cortada, los usuarios del Centro de Interpretación pueden entrar en La Gándara a través de la carretera que une esta localidad con Ramales de la Victoria. Aunque no hay viviendas en esta zona, sí hay cabañas y ganaderos que hacen uso de los pastos para su ganado, que pueden pasar andando a través del camino alternativo que se va a adecuar para poder acceder con vehículos, ya que actualmente no está habilitado para el tránsito rodado.

Por otro lado, técnicos del Gobierno de Cantabria inspeccionan y realizan un seguimiento del argayo de Ruente, que ha vuelto a moverse en su parte superior, algo que ya estaba previsto dado las intensas lluvias de los últimos días. El Gobierno de Cantabria trabaja en labores de control, seguimiento y limpieza para evitar la caída de piedras a la vía.

Igualmente, la Dirección de Obras Públicas del Gobierno de Cantabria trabaja de forma coordinada con los ayuntamientos para la resolución de estas incidencias, como es el caso de los consistorios de Rasines y Arredondo, donde se han producido algunas de las incidencias más importantes.

No sólo los argayos están provocando complicaciones en las carreteras. El temporal se ha cebado también con la playa de Los Peligros, en Santander, donde las intensas y constantes lluvias han provocado esta pasada madrugada un corrimiento de tierra en la ladera existente entre la avenida de Reina Victoria y la propia playa.

Un problema que se une al 'mordisco' de arena que ha sufrido Los Peligros en los últimos días como consecuencia de las olas. Así, el oleaje ha mordido el arenal hasta tal punto que ha dejado un llamativo escalón justo antes de llegar a las instalaciones de La Horadada. El límite de la playa, con la marea alta, está justo en el borde de la rampa y las escaleras que vienen desde el paseo de Reina Victoria. Quedan, de hecho, a la vista las conducciones que alimentan de agua a las duchas.

El 112 ha recibido numerosas llamadas a lo largo de la noche de personas afectadas por inundaciones. Los bomberos, tanto municipales o autonómicos, han intervenido, además de en el aparcamiento de Valdecilla, en un garaje de Polanco, en otro de Isla, en una entreplanta de Argoños, varios en Santander y dos más en Arnuero.

En Camargo la noche también ha sido ajetreada. Los bomberos se han desplazado a varias calles para achicar agua de garajes subterráneos y vías públicas.

La situación, eso sí, tiende a mejorar. No hay alertas meteorológicas activadas, hoy por la mañana llueve bastante menos que anoche y las aguas van regresando a sus cauces.

Aunque hoy no hay alertas, se esperan lluvias constantes en toda Cantabria, que viene soportando precipitaciones intensas hace días. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) prevé chubascos que podrían ir con alguna tormenta ocasional, poco probables hacia el sur, aumentando a cubierto a mediodía con lluvias generalizadas que llegarán de nuevo al final del día.

Cota de nieve en torno a los 800-1.000 metros, subiendo a mediodía a 1.000-1.200 y por la noche por encima de 2.000. Temperaturas mínimas con pocos cambios y máximas en ascenso. Heladas en general débiles en zonas altas de Liébana y Campoo.

Viento del oeste y noroeste, flojo en el interior y ocasionalmente fuerte en el litoral, girando por la tarde a sur y suroeste. Rachas muy fuertes al final en el litoral oriental y en cumbres.

Temperaturas mínimas y máximas previstas: Cabezón de la Sal, 5 y 12 grados; Castro Urdiales, 8 y 12; Potes, -1 y 10; Reinosa, -3 y 6; San Vicente de la Barquera, 6 y 13; Santander, 9 y 12; y Torrelavega, 6 y 12 grados.