La ley del 'solo sí es sí' reduce los años de prisión a otros dos condenados por agresión sexual

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s. e.

Con estos últimos cambios, un hombre ha visto reducida su pena de ocho a seis años. Se trata de una condena impuesta en julio de 2019 por abusar sexualmente de un chico de 14 años al que hizo una felación y obligó a realizar la misma práctica. El segundo de los reos que sale beneficiado en la región pasará de estar en la cárcel seis años a cuatro. El hombre fue condenado en marzo de 2018 por agredir sexualmente a una mujer a la que penetró y obligó a realizar una felación. Además, en ambos casos, la aplicación de la legislación actual lleva aparejada también una nueva pena: la de inhabilitación para profesión y oficio que conlleve contacto con menores.

Estas revisiones se suman a su vez a las cinco reducciones que ya se habían dado en Cantabria. Así, en total ya son siete las sentencias en las que se han rebajado las penas. Una serie de cambios que obligaron a los jueces a excarcelar a dos condenados por delitos contra la libertad sexual en apenas dos meses. El último se conoció en diciembre de 2022 al pasar de cuatro años y medio a tres años de cárcel. La rebaja a un hombre acusado de agresión sexual con penetración supuso su liberación. El juez valoró dos circunstancias atenuantes: reparación del daño, porque entregó la indemnización con anterioridad a la celebración del juicio; y drogadicción, «ya que era drogodependiente y ello mermaba levemente sus facultades», informó entonces el Tribunal.

Antes de las dos últimas reducciones que se dieron a conocer ayer, la Audiencia Provincial de Cantabria ya había rebajado cinco penas a condenados por agresión sexual desde la llegada de la reforma del Código Penal. Además del excarcelado de diciembre, otro hombre salió de la cárcel un mes antes tras reducirse su condena de cinco a dos años. El otro de los supuestos es el de un reo cuya pena se redujo de seis a cuatro años. El acusado sufre esquizofrenia paranoide y fue condenado en febrero de 2021 por agredir sexualmente a su compañero de habitación en un centro psiquiátrico de Santander. Además, dos violadores condenados a dieciocho años de cárcel consiguieron rebajar sus condenas a once.