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El miércoles hizo calor en Cantabria. Mucho. Pero aun así, los 40º de la localidad de Tama se quedaron bastante lejos del récord desde que la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) contabiliza los datos hace ya 32 años. El 17 de julio de 2022 ... Cantabria vivió la jornada más calurosa de su historia. Literalmente, fue un horno. Una estación de medición manual que depende de la agencia pública pulverizó, con sus 43,5º, el anterior registro. Hasta entonces, Polientes (Valderredible) había ostentado la máxima: 41,8º en el año 2012.
El verano pasado fue atípico. La región vivió dos olas de calor diferentes. La primera llegó en junio y la segunda un mes después. Hasta el momento, este fenómeno extremo cada vez más habitual en el resto del país nunca se había posado aquí. Como mucho, había dejado alguna jornada que otra de calor asfixiante. Fueron varios días consecutivos -y noches- de bochorno. El 17 de julio reventó todos los registros máximos. No sólo por los 43,5º de Terán de Cabuérniga, también hubo otras estaciones de la Aemet que superaron el tope de los 41,8º de Polientes. Por tanto, se puede decir que Terán, Tama y San Felices de Buelna -con sus respectivos, 43,5º, 43º y 42,9º- se convirtieron en las sartenes Cantabria: es decir, los puntos donde los meteorólogos han constatado que ha hecho más calor de toda la serie histórica.
Los récords
17/7/2022 Terán alcanza los 43,5º
17/7/2022 Tama llega a los 43º
17/7/2022 San Felices de Buelna sumó hasta 42,9º
17/7/2022 Ramales de la Victoria alcanza los 42,3º
17/7/2022 Bárcena Mayor, el termómetro sube hasta 42,2º
España está viviendo esta semana los rigores de lo que para el resto del país -aquí, no- es la tercera ola de calor desde que comenzó el verano. Cantabria se libraba una vez más, pero los pronósticos vaticinaban un miércoles duro. La Aemet activo el aviso naranja -riesgo alto- y alertó de que habría puntos que rondarían los 40º. Lo clavó. Tama, en el municipio de Cillorigo de Liébana, alcanzó precisamente esa cifra.
En el resto de la comunidad también apretó el calor, pero menos. La costa se salvo, en parte, gracias al viento del este. Lo que no apareció fue la anunciada galerna, que se quedó en algo de viento fuerte -en Castro Urdiales hubo rachas de 76 kilómetros por hora- que tiñó el cielo de gris a última hora y rebajó ligeramente el mercurio de los termómetros en el litoral.
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Cantabria vivió ayer una nueva jornada de calor; eso sí, menos dura que la anterior. Aun así, se superaron los 30º en varios puntos de Valderredible -33,2º en Polientes y 33,1º en Cubillo del Ebro- y en otros se acercó a esta cifra: 29,2º en Tama, 28,9º en Fuente Dé, 27,8º en Ramales de la Victoria y 27,6º en Bárcena Mayor. Las temperaturas también fueron elevadas en la costa: 26,8º en Santander, 26,6 en San Vicente de la Barquera, 26,3º en Treto y 25,9º en Castro Urdiales.
El tiempo seco y soleado continuará sólo hasta hoy. La previsión de la Aemet para este viernes es de cielos despejados y radiantes perfectos para los amantes de la sombrilla, la toalla y la playa o la piscina.
El fin de semana se torcerá. El cielo se nublará y lloverá de manera débil en toda la región a excepción del sur. Eso contribuirá a que desciendan las temperaturas, que aun así seguirán siendo agradables y veraniegas.
La Aemet anuncia un domingo algo más nuboso, con proabilidad de algunas lloviznas y apertura de claros en Campoo y Valderredible.
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