El toque de queda se mantiene a las diez tras la negativa del Ministerio a cambiarlo

Partidarios de que «las comunidades autónomas tengan posibilidad de regular el toque de queda por debajo de las diez». Eso había expresado el consejero de Sanidad, Miguel Rodríguez, por la mañana. También el presidente Revilla había dejado claro días atrás que lo vería con buenos ojos. Un adelanto del toque de queda, siempre y cuando viniera autorizado por el Ministerio y que la norma fuera para todos la misma, «sin dislates». «Si la opinión mayoritaria es que se modifica la hora no lo vería yo mal». Eso sí, ni uno ni otro manifestaron una petición concreta en cuanto a una hora para el encuentro que tuvo lugar ayer tarde. Revilla dijo que eso era cosa de Sanidad, que él no era «médico», y el consejero que, llegado el caso, sería el departamento de Salud Pública quién fijase la hora de un nuevo toque de queda en la región. Y esa fue, a grandes rasgos, la postura que llevó Rodríguez a la reunión de ayer tarde. A favor de un cambio, pero sin pedirlo (y sin contradecir al Gobierno, del mismo color político).

Illa no dio el brazo a torcer en eso ni tampoco en otra de las peticiones de algunas comunidades. Que más allá de confinamientos perimetrales, se permitiera a las autonomías determinar confinamientos domiciliarios. Tampoco habrá cambios en eso.

¿Y cómo se valoró en Cantabria lo sucedido en la reunión? Pues desde Sanidad, con silencio. El consejero se remitió a lo dicho por el ministro y no hizo las declaraciones que se le pidieron. «Nosotros estamos sujetos a un estado de alarma del Gobierno, que es el que tiene la competencia», manifestó Revilla a preguntas de este periódico. El presidente reconoció que hay «una corriente mayoritaria que quería ponerlo a las ocho», pero apuntó que el ministro se limitó a tomar nota. «Tengo la impresión de que no lo hacen porque tendrían que ir otra vez a comparecer al Parlamento. Supongo, no sé». Del mismo modo, confirmó la postura de Cantabria. Sin pedirlo expresamente, pero partidaria de aplicarlo «si había una mayoría que estuviera de acuerdo y si la medida era respetada por todos». En esto, añadió que comunidades como Madrid o Castilla y León van «a su bola». De hecho, dijo que seguirán con atención lo que decide el Tribunal Supremo en torno a la decisión unilateral de Castilla y León de adelantar el toque de queda. «Tengo la impresión de que el Supremo no lo va a permitir».

«Nosotros -resumió- sí que hemos hecho mucho hincapié en la vacuna, para que se acelere. Porque ha habido un recorte importante. En eso hemos insistido. Vacuna y vacuna. Lo del toque de queda, pues bueno. Teniéndolo a las diez tampoco nos cambiaba extraordinariamente las cosas. Lo primordial es que cada uno asuma su responsabilidad y que sigan llegando las vacunas. Eso es lo prioritario».