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Cantabria espera recibir entre mañana y el lunes 60.000 vacunas contra el covid, (4.500 dosis de Janssen, 33.930 de Pfizer, 17.879 de AstraZeneca y 3.800 de Moderna). Así lo ha asegurado esta mañana el vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, quien también ha avanzado que Salud Pública tiene previsto empezar la próxima semana a vacunar contra el covid-19 al grupo de población de entre 40 y 49 años, después del «peinado» que va a realizar en las franjas de 60 a 69 y 50 a 59 años para completar en ellos el proceso. De esta forma, es «propable» que la región pueda adelantar la inmunización de los mayores de 40 años gracias a la llegada de esas dosis.
En Cantabria hay 61.476 personas que han recibido la primera dosis de AstraZeneca y que están pendientes de recibir la segunda, incluidos los colectivos esenciales que podrán elegir entre el suero británico o Pfizer. Sobre la preocupación de aquellos que creen que no podran completar la pauta con la misma vacuna, Zuloaga ha asegurado que «habrá dosis suficientes»: «La consejería trabaja con un stock de seguridad ante los vaivenes».
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Cantabria ha vacunado a 230.689 personas con al menos una dosis, de las que 121.193 están inmunizadas con la pauta completa. Así, el 46% de los cántabros que son objeto de vacunación -los mayores de 16 años- han recibido al menos un pinchazo, y el 24,2% son inmunes.
Se da por inmunizada ya al 100% de la población mayor de 80 años y al 96,6% de personas entre 70 y 79 años, mientras que el grupo de 60 a 69 está vacunado con una dosis al 78,4% y el 10,3% tienen la pauta completa.
Por otro lado, la consejería de Sanidad tiene la «máxima concentración» puesta en la variante india detectada en seis casos positivos localizados en Colindres. Según el vicepresidente del Gobierno de Cantabria, Pablo Zuloaga, Salud Pública vigila «de cerca» el brote de 23 positivos, que también afecta a Bezana, para «garantizar la seguridad de todos los cántabros».
El brote ha llamado la atención a los técnicos por su elevada virulencia: «Es de fácil transmisión y lleva a un buen número de contagiados a ingreso hospitalario», ha dicho Zuloaga. De los 23 casos, con edades entre los 42 y los 73 años, 10 han requerido hospitalización, aunque ahora sólo quedan dos y según el alcalde de Colindres, Javier Incera, «la mayoría» ya ha recibido el «alta médica y está» a «plena actividad».
Incera ha indicado que el momento «álgido» de este brote se produjo en la primera semana de mayo, cuando el número total de contagiados en el municipio estaba entre 10 y 12 personas, por lo que «tampoco era una situación extrema». En aquel momento, «nadie sabía» que los contagiados pertenecían a la cepa india, puesto que los resultados de la secuenciación de las pruebas han llegado en las en las últimas horas. Aún así, el alcalde de Colindres ha abogado por afrontar la situación «con la tranquilidad de saber que el nivel 2 nos lo ha puesto el Gobierno de Cantabria según los datos que ellos tienen» y por tener «prudencia y cautela» dado que Salud Pública todavía «no puede afirmar que la situación esté controlada». El último caso se detectó el día 21, lo que hace que el brote siga activo. Por ello, la Consejería de Sanidad está volviendo a realizar todo el rastreo «por si hubiese habido alguna posible arista que se hubiese perdido».
De los 23 casos, seis han sido analizados mediante secuenciación completa del genoma viral, confirmándose en todos ellos el linaje B.1.617.2, correspondiente a la variante india. La secuenciación del genoma viral para comprobar si correspondía a alguna variante se solicitó por tratarse de un caso importado y por lo rápido que se extendía el brote y su elevada tasa de hospitalización.
El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, también se ha referido este jueves a la variante india detectada en Cantabria y ha asegurado que el Gobierno está «preocupado», pero insiste en que la región sigue siendo «absolutamente segura». Revilla ha detallado que, al parecer, el contagio procede de un viaje a Polonia de un ejecutivo de una empresa de la zona oriental de Cantabria y luego lo ha trasladado a algún compañero de trabajo y a un entorno familiar.
Pese a todo, el regionalista confía en que este brote «no vaya a más» y «no tenga mayores consecuencias» para Cantabria, que, sigue siendo «una región absolutamente segura»: «Lo que me dicen es que está muy controlado y que los rastreadores están trabajando a tope para conseguir»cuanto antes aislar este foco«.
Baja la presión hospitalaria
Sanidad ha notificado este miércoles 49 nuevos positivos, 17 más que en la jornada anterior, pero según Zuloaga, en lo que va de día solamente se ha contabilizado un contagio más.
En la otra cara de la moneda, esa que siempre lleva algún dato negativo, se encuentra en fallecimiento de una mujer de 79 años por complicaciones derivadas del covid-19 y que eleva el total de muertos en Cantabria por el virus a 568.
En lo que se refiere al número de ingresos, Salud Pública ha comunicado 36 hospitalizados, 12 de ellos se encuentran en la UCI, cuatro menos que en la jornada anterior. De este modo, la ocupación hospitalaria ha bajado del 2,8 al 2,6% y la de la Unidad de Cuidados Intensivos del 15,2 al 10,5%.
De los ingresados, 30 se encuentran en el Hospital Valdecilla , tres en Sierrallana y tres en Laredo.
La incidencia acumulada a 14 días se mantiene como ayer en 83 casos por 100.000 habitantes, mientras que la acumulada a siete días ha subido de 40 a 44. En la misma línea, la positividad de las pruebas ha crecido una décima y se sitúa en el 4 por ciento.
Según los datos de la Consejería de Sanidad, el número de casos activos en la región es de 1.961 (114 menos que la víspera), de los que 36 están hospitalizados y 1.925 en cuarentena domiciliaria.
Con el nuevo recuento, los acumulados positivos desde el inicio de la pandemia en Cantabria ascienden a 31.289, de los que 30.030 se han detectado mediante prueba PCR y 1.259 a través de test de detección de anticuerpos.
Por su parte, el número de curados alcanza los 28.760, que son el 92 por ciento de los infectados.
Además, según ha destacado Zuloaga, las residencias cántabras ya vuelven a estar libres de covid tras haberse superado el último brote surgido en la de Quijas.
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