Vino y gastronomía, un lazo que se fortalece con el idioma

El foro comenzó con el coloquio en torno a 'Empresas familiares en el sector Vitivinícola' con la participación de importantes integrantes de la cultura del vino en Chile y España. Con la moderación de Paula Escobar, editora de Revistas de El Mercurio, se dio paso a una amena conversación sobre la importancia de la tradición familiar en el mundo del vino. Cómo mezclar la innovación con la tradición o cómo tratar al nuevo consumidor fueron algunos de los temas que se trataron en esta primera parte del encuentro. Junto a Andrés Turner, gerente general de Viña Montes, Cristóbal Undurraga, gerente general de Viña Koyle, José Miguel Munilla, consejero delegado de Ramondín, Jaime Valderrama, director general de Bodegas Torres, y Santiago Vivanco, director de la Fundación Vivanco, se entró en un entretenido debate y análisis de la situación actual del mundo del vino.

Los ponentes, pusieron varios temas sobre la mesa como, por ejemplo, el desarrollo sustentable en esta industria, la creatividad, innovación... Fue José Miguel Munilla quien dejó una de las frases más representativas de la charla: "Quien no sale de la zona de confort, queda fuera del juego". Una clara declaración sobre la importancia de arriesgarse en el mercado para no quedar atrás.

Después se dio paso a la segunda mesa redonda con la presencia de Jesús Sánchez, reconocido chef español, Chris Carpentier, uno de los chefs chilenos más importantes de la última década, Benjamín Lana, director editorial de Vocento, y a Carlos Maribona, crítico gastronómico del diario ABC, todos liderados por Bárbara Muñoz, editora de revista Wikén de El Mercurio.

La temática central giró en torno a esa larga historia de 500 años de fusión en las cocinas españolas y americanas, con una conclusión: la primera no se puede entender sin la segunda.

Jesús Sánchez enfatizó su postura sobre la importancia de cuidar el entorno, destacar a los productores y los productos para lograr la mejor armonía en el resultado final. En tanto, Carlos Maribona puso en la mesa el tema de Chile y su posibilidad de ser una potencia gastronómica, dando a entender que estaba en manos del país proponérselo puesto que hoy tiene todas las herramientas y ejecutores para lograrlo.

Todos los asistentes se mostraron felices con las charlas, interactuando con los chefs y críticos, quienes al final de la ponencia se dieron el tiempo para seguir intercambiando impresiones, resolviendo dudas y dando consejos gastronómicos.