Cine Club Santander regresa al Casyc hasta final de año

Desde su inicio en la Filmoteca de Cantabria, el Cineclub, fundado por Fernando Ganzo (actual redactor jefe adjunto en París de la revista Cahiers Du Cinéma) y José Luis Pérez Trespalacios (actual director y presentador del espacio, conocido como José Luis Torrelavega) el Cine Club ha celebrado esas más de 350 sesiones. Cada cita consta siempre de presentación, proyección y posterior debate. Pero además, desde su primera cita -dedicada a 'Una pistola al amanecer' de Jacques Tourneur, un gran cineasta al que se ha vuelto con regularidad- «se rescataron de manera continuada, no sólo una ingente cantidad de textos descatalogados pero fundamentales, sino otros muchos traducidos por primera vez al español: un significativo número de escritos de autores como Bernard Eisenschitz, Chris Fujiwara, Jonas Mekas, Jeanine Basinger, François Truffaut, Jacques Lourcelles, Peter von Bagh, Miguel Marías, Álvaro del Amo, John Baxter, Tag Gallagher, Jean Douchet, o Jean-Luc Godard, entre otros.

Con la colaboración con la Fundación Caja Cantabria se produjo, según los organizadores, «una enorme progresión en la ambición pedagógica de nuestra mirada hacia las formas del cine, permitiendo un acercamiento al análisis y disfrute cinematográfico aún más dinámico, detallado y variado, y no menos riguroso». De esta manera, y como ha sido objetivo del Cine Club Santander desde su arranque, se han ido presentando semanalmente al público cántabro películas poco vistas, recuperadas por fin, tras muchos intentos, en copias restauradas o de gran calidad, tanto digitales como en 35mm, o listas para ser descubiertas y colocadas en el puesto que realmente merecen en la historia del cine.

Tras la cinta de Ford, la programación, que se extenderá hasta diciembre, contempla al inicio de octubre la proyección de 'La maman et la putain' (1973) de Jean Eustache con Jean-Pierre Léaud como protagonisa. «Un auténtico monumento del cine moderno, y para muchos la más importante película del cine francés en los años setenta (también una de las más polémicas). Tras años sin exhibirse por distintos problemas, el estreno de la copia restaurada en Cannes ha permitido el ansiado regreso a los cines. Estreno en Santander de la nueva copia restaurada.

El mes se completa con las proyecciones de 'La venganza del bergantín', de Edward Ludwig , con John Wayne: una obra de culto entre los cinéfilos, y una de las películas de aventuras más poéticas y evocadoras de su época. Y 'Moonrise' (1948) de Frank Borzage: Obra de plenitud y madurez de un gran cineasta, que combina a partes iguales cine negro y melodrama romántico.

En noviembre la programación está centrada de manera monográfica en un ciclo de películas de John Farrow, que abrirá la proyección de 'Calcutta' (1946) con Alan Ladd al frente del reparto. Combinación de cine negro y aventuras que inicia un homenaje a «uno de los nombres por reivindicar del gran cine americano». 'El reloj asesino' (The Big Clock, 1948), con Ray Milland, Charles Laughton y Maureen O'Sullivan, es una de las más angustiosas y visualmente espectaculares películas del cine negro. 'Mil ojos tiene la noche' (Night Has a Thousand Eyes, 1948), con Edward G. Robinson, es una memorable adaptación de la novela de Cornell Woolrich, con todo su sabor onírico y obsesivo. Y 'Alias Nick Beal' (1949), ejercicio de un cineasta de enorme fuerza narrativa y visual.

Finalmente la programación se cierra el 13 de diciembre con «la primera sesión doble psicotrónica» configurada por 'El carnaval de las almas' (1962) Herk Harvey, más 'La maldición de los Bishop (1971) de John D. Hancock.

El Cine Club abre así una serie de sesiones dobles periódicas que no sólo recuperan el espíritu más lúdico del cine (sesiones continuas de cine de terror, fantástico, rarezas a descubrir...) sino que homenajea a las «películas psicotrónicas», las que el especialista Michael Weldon definió como «las películas tradicionalmente ignoradas o ridiculizadas por los principales críticos en el momento de su lanzamiento: terror, explotación, acción, ciencia ficción, cintas que solían proyectarse en autocines o grindhouses del centro de la ciudad».

Y que, sin embargo, son muchas veces un gran festín visual y de emociones.