Alain Delon es el gato
Sala Bonifaz ·
Deseo y suplantación ambigüedad y celos, luz que deslumbra y oscuridad, el mejor Ripley en un excelente retrato de misterio vitalSecciones
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Sala Bonifaz ·
Deseo y suplantación ambigüedad y celos, luz que deslumbra y oscuridad, el mejor Ripley en un excelente retrato de misterio vitalPara mostrarse como el amoral Ripley hay que ser brillantemente viscoso, seductoramente impasible y desprender un extraño encanto. De todo ello se sirvió Alain Delon para habitar un thriller, 'A pleno sol', que en realidad es un magnífico estudio de la condición humana. Entre el ... arribismo y la ambición, la distancia y la asfixia, a medida que crece el filme al espectador le invade una sensación de laxitud que no está reñida con un cada vez más profundo estado de ahogo. El cineasta René Clément, nunca valorado como se merece, atrapado entre dos épocas, la del realismo poético francés y la llegada de la nouvelle vague, firmó con clase, elegancia y claridad esta primera versión en pantalla de la novela de la escritora Patricia Highsmith.
País Francia
Año 1960
Dirección René Clément
Guion Clément, Paul Gégauff
Reparto Alain Delon, Marie Laforêt, Maurice Ronet, Billy Kearns, Elvire Popesco
Género Thriller/Drama
Otra autora demasiado encasillada que logra en esta historia de falsas identidades y morbo tras la superficie de las cosas, una trama que es toda una incursión en las agitadas y turbulentas entrañas de la mente. Entre el resplandor y la sombra como metáforas, Clément supo atisbar los pliegues y extrañezas en una obra que participa tanto de la intriga como del policíaco y ese vibrante enredo psicológico que discurre pegajoso entre la envidia y los celos, entre el deseo y la suplantación. Junto a la capacidad de síntesis, hoy tan arrinconada y una excelente fotografía, 'A pleno sol' logra construir una sutil tela de araña en la que tiene tanta importancia el trío protagonista como la puesta en escena del cineasta de 'Juegos prohibidos', su película más famosa. Ripley, Phillipe y Marge (o sea, Delon, Maurice Ronety Marie Laforêt) van más allá del triángulo y entre influencias de Hitchcock generan una atmósfera donde colisionan a favor de viento narrativo la sobriedad y la tensión creciente. Como una serpiente, lo sinuoso y lo atractivo, ambos integrados por un eslabón de sospecha, adquieren la textura especial en el filme que proyectó la carrera de Alain Delon, en la que es probablemente una de sus grandes interpretaciones dentro de una extensa pero irregular trayectoria.
Highsmith y su Mr. Ripley propició otra versión reciente de Anthony Minghella con Matt Damon, con mucho menos encanto pese a ser más fiel con la novela y su final. La frialdad amoral, la ausencia de emotividad del personaje es retratada con sutileza. Ripley a la sombra de su víctima, busca mimetizarse con el entorno. Lo humano ambiguo, lo social falsificado componen una ecuación sin resolución, más allá de ese misterio vital donde combaten la luz y la oscuridad que enmarcan a sus criaturas.
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