Lara Gómez, récord júnior de los 200

La actual campeona de España júnior de los 100 metros atraviesa un gran estado de forma. De hecho, en la segunda jornada de la Liga Cántabra de Atletismo, el pasado 23 de abril, ya realizó un espectacular registro de 24.41 en la misma prueba, aunque fue invalidado a efectos de ranking por el excesivo viento favorable que se registró (+2.5). En esta segunda oportunidad las condiciones fueron ideales y el anterior récord (24.77), en poder de Idoia Granda desde 1988, pasó a la historia.

Lara Gómez se hizo además con la mínima para el nacional de su categoría, lo mismo que consiguieron otros cuatro deportistas de la región durante la amplia e intensa jornada de competición, la segunda del Autonómico Juvenil, Cadete e Infantil, que además albergó el Regional de obstáculos en categorías menores.

Los obstáculos

En esta especialidad brilló el atleta de la EDM Piélagos Marco Gómez, que se quedó a poco más de dos segundos de la plusmarca regional de 1.500 obstáculos, en poder del internacional Samuel Abascal (4.25.02). Tras una gran cabalgada en solitario, el joven deportista de Mortera paró el crono en 4:27.18 para colgarse el oro y hacerse con el billete nacional en esta especialidad. También en categoría cadete cayeron otras dos mínimas, en este caso en los 100 metros vallas. Jorge García (Olimpia-Seat Miguel Arroyo) y Yaiza Aragón (Atletismo Villa de Cabezón) subieron a lo más alto del podio tras vencer en la final y registrar, a lo largo de la tarde, dos mejores cronos de 14.93 y 15.98, respectivamente.

Mario del Río (Torrelavega) fue el otro atleta que logró la clasificación directa para el Campeonato de España. El velocista laredano venció en el control de 200 masculino con un gran tiempo de 22.51, mínima para el Nacional júnior que tendrá lugar en julio en Castellón. Tras esta competición, puntuable para la XXII Liga Escolar de Menores en lo que se refiere a las pruebas de obstáculos, el CA Olimpia-Seat Miguel Arroyo sigue mandando en la clasificación general de la competición, aunque seguido a poco más de cincuenta puntos por los castreños del Carbonero.