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Si la temporada pasada el Grupo Alega Cantabria se había convertido casi ya a estas alturas en el equipo revelación de la campaña en LEB Oro, este curso los de David Mangas rozan la zona baja de la tabla. Pero una cosa es coquetear con ... la línea de los puestos del descenso y otra distinta estar en ellos. Y el Alega se resiste a caer entre los tres últimos con el mismo ahínco que un gato clava sus garras en la alfombra del baño para que no lo metan en la bañera. Esta tarde los torrelaveguenses, décimo quintos a causa de las tres derrotas consecutivas que suman, gozarán de una nueva oportunidad para revertir la situación.
El Alega necesita un resultado positivo para poner tierra de por medio, dispuesto a recuperar su camino tras su dolorosa derrota en los segundos finales ante el Real Valladolid por un solo punto. Eso sí, ni contarán con la complicidad del Vicente Trueba ni con el calor de su público, con la excepción de los aficionados que se desplacen hasta el pabellón El Plantío, donde les espera el Tizona Burgos, que es quinto y lleva dos victorias consecutivas.
Porque los cántabros lucharán en la exigente cancha ante un Tizona que llega con una racha de dos victorias consecutivas y está a una del liderato tras un inicio de temporada de ensueño. Y lo tienen claro. Como decía esta semana el ala pívot Rodrigo Seoane, «El Plantío tiene que ser un fortín».
Los de Diego Ocampo, que seguramente piensan que no hay dos sin tres, pondrán a prueba a los de Mangas, que necesitan ganar este partido para alejarse de la quema, remontar en la Liga y recuperar la confianza en sí mismos. Alega y Tizona enfrentan, además, rachas casi opuestas. Dos victorias por tres derrotas. Pero es que además, hay varias similitudes a la inversa entre los dos equipos en su último partido disputado. Como un reflejo perverso en el espejo.
Si el Grupo Alega, después de ir ganando, cayó por un punto ante los pucelanos (81-82) en los segundos finales, el Tizona también se impuso al Real Betis por uno de diferencia (84-85). Y eso a pesar de que los burgaleses llegaron a perder por hasta 14 puntos, pero lograron la remontada en la segunda mitad y sumaron la quinta victoria de la temporada también en los instantes finales del partido.
Los problemas físicos del Alega van remitiendo lentamente, pero lo cierto es que el equipo no ha tenido demasiada suerte en este tramo inicial de temporada con la enfermería. A la lesión de Sierra se sumó la de Aitor Etxeguren, que todavía no ha podido disfrutar de minutos en Liga a las órdenes de Mangas. Así todo, el técnico abulense tiene la misión de exprimir al máximo sus recursos para crear un punto de inflexión y lograr una victoria que cierre heridas.
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