El Grupo Alega sube el listón

DagoPeña abrió el marcador para el Alega y poco después Santana y Baeza sumaron para los locales. Entonces Sans entró en juego, el de Mahón no estaba dispuesto a dejar que el Albacete se fuese en el marcador y menos tan pronto. Sus dos tiros libres amararon a los de David Varela, o eso pensaron los cántabros, porque nada más lejos de la realidad. Blat y Ferrando continuaron con el toma y daca (9-4). Harrar, que la pasada jornada se echó el equipo a la espalda y se marcó un partidazo ante el Ourense en el Vicente Trueba, se dispuso a hacer lo mismo en el Pabellón del Parque ayudado esta vez por Walter Junior y Bulic, pero los locales no daban su brazo a torcer y tampoco dejaban resquicios en su defensa. No había forma de castigarlos bajo el aro y el primer parcial se quedó en casa (24-16).

Había que cambiar las cosas en el segundo asalto. Los de Mangas echaban en falta a algunos de sus jugadores insignia, pero eso no era excusa. No al menos para el técnico de los cántabros no que paraba de pedir más intensidad y entrega. Se trataba de recortar distancias como fuera. La arenga de Mangas pareció funcionar y las canastas de Harrar, Peña y Palazuelos paliaron la sequía anotadora del Alega y lograron que los torrelaveguenses tomasen un poco de aire en Albacete (36-30).

Shakir Smith saltó a pista en el segundo parcial después de haberse perdido el partido anterior por lesión. Pero el estadounidense no logró estrenarse bajo el aro y más tarde, en la reanudación tras el descanso Mangas optó por enviarlo de nuevo al banquillo. Mejor dosificar que tener que lamentar una nueva lesión.

Sangre fría y muchos puntos

El segundo parcial se cerró con un 14-16 que reflejaba la reacción de los cántabros en la pista del Pabellón del Parque, pero el 38-32 global que reflejaba el marcador al descanso no era nada tranquilizador. Parecía que poco a poco el partido se le escapaba como arena entre los dedos a los cántabros, pero Mirza Bulic no pensaba permitirlo. El bosnio se convirtió en un torbellino sobre la pista y se dejó la piel y las muñecas lanzando a canasta. 23 puntos en total que valen su peso en oro se marcó el jugador del Alega. Bulic sumó 15 tantos tras el descanso y los torelaveguenses poco a poco fueron recortando distancia con su rival. Tanto que en poco tiempo consiguieron igualar, e incluso dar la vuelta a la contienda por obra y gracia de la combinación Bulic-Walter-Harrar, que entonces ofrecieron sus mejores minutos de partido. Dago Peña, desde 8 metros y medio, anotó un triple vital (66-72) a falta de 3.25 para el final del partido. Ferrando contestó y devolvió el nerviosismo a las filas cántabras (72-74), pero Bulic se encargó de disipar las dudas y deshacer el entuerto. El Alega mantuvo la ventaja y sumó una nueva victoria. Un paso más a la permanencia.