El Unicaja se aferra a la Asobal

El Sinfín consiguió llegar al descanso con una mínima ventaja (15-14) después de una primera parte intensa, vibrante y llena de alternativas. Empezaron bien los de Montesinos, que a los cinco minutos llevaban una renta de tres goles gracias a sus rápidas y eficaces acciones en ataque y a los errores de los de Cangas, algo desordenados de inicio y flojos arriba. Sin embargo, no consiguieron los de Santander mantener la ventaja y en apenas tres minutos el Frigoríficos logró la igualada gracias a las buenas acciones de Javi Díaz en la portería y de Santi López y David Iglesias en el ataque.

Con un parcial de cero a cuatro, el conjunto gallego entró de lleno en el partido, complicándole las cosas a un Unicaja Banco poco acertado en las acciones ofensivas. Lucas Aizén puso por delante a los suyos y pasado el cuarto de hora conseguía ponerse por delante con una ventaja de tres tantos (6-9). Parecía diluirse el conjunto local, pero enseguida se repuso. Fue necesario un tiempo muerto pedido por Montesinos para que el equipo mejorase en defensa y buscase mejores opciones en el ataque. Las acciones de Malus, Xavi Castro y Zungri fueron decisivas para devolver a los de negro al partido.

En los últimos diez minutos reinó la igualdad, que deshizo Xavi Castro en el último minuto antes del descanso para llevar a los suyos con ventaja a vestuarios.

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A pesar de que los de Cangas igualaron en la reanudación, el Sinfín amplió ventaja y se puso tres arriba (19-16) gracias al acierto ofensivo y los goles de Zungri y Pla. El encuentro entró entonces en un periodo de jugadas rápidas, errores defensivos de Cangas, paradas de Ernesto y aciertos de un Sinfín en ataque que se puso cinco arriba (23-18). El Frigoríficos, diluido, parecía fuera del partido, dando aún más alas a un Unicaja Banco que con tantos de Malus, Castro y Pla llegó a estar seis arriba (27-21) y con todo a su favor para llevarse los dos puntos del choque. No obstante, los gallegos no parecían dispuestos a regalar los puntos en juego. Los de Nacho Moyano recortaron diferencias y se pusieron a cuatro tras varios ataques precipitados del Sinfín y las buenas acciones ofensivas, eléctricas, de los gallegos. Unicaja, a pesar de la reacción momentánea de Frigoríficos, supo gestionar la renta y se mantuvo en todo momento con una cómoda renta de cuatro o cinco tantos a falta de cinco minutos para el final.

En la recta final Unicaja cometió varios fallos en ataque, resultado de los nervios, que dieron vida a los de Moyano, quienes obtuvieron un parcial de cero a tres. En un final intenso y lleno de tensión, Cangas volvió a meterse de lleno en el choque situándose a dos goles y sembrando el pánico en los locales, que solo ganaban de uno en el último minuto (31-30). Dani Fernández, desde siete metros, consiguió el empate. Pero Unicaja resucitó y con un tanto en los últimos segundo, se llevó los dos puntos en un final agónico.