Víctor González: «Si estoy a mi máximo nivel es difícil ganarme, pero imbatible no soy»

Víctor González (Astillero, 8 de julio de 1994) está acostumbrado a ganar. Pese a ello, su gesto de echarse de rodillas nada más imponerse por quinta vez en el Campeonato de España es sintomático de lo que le costó ganar el viernes en Treceño.

–¿Ha sido su Campeonato de España más difícil?

–Yo creo que sí, por la dificultad de empezar el primer día ya con desventaja y luego acumular más hasta ponerme a 29 bolos del primero. He ido pasando cortes y aguantando el mal juego, sobre todo a la raya alta, que me ha costado muchísimo desde el principio. He ido adaptándome a la bolera como he podido y los dos últimos concursos han sido bastante buenos. Ha sido un campeonato de aguantar mucho y de luchar hasta el final. Yo tenía claro una cosa, que lo iba a dar todo hasta la última bola y ha merecido la pena.

–¿Le había dado muchas vueltas las dos primeras noches a lo que había ocurrido en la bolera los dos primeros días?

–No, no soy de darle vueltas. En cuanto entro a la bolera intentó corregir los fallos, sobre todo de birle, pero no me como la cabeza en ese sentido porque si te obsesionas es peor. Sí que tienes claro que no has jugado a tu máximo nivel, que no has estado fino desde el principio y que se está complicando el campeonato, pero bueno, hay que darlo todo por si acaso y en este caso mereció la pena. Muy orgulloso de haber aguantado.

–Hablaba de los problemas a raya alta ¿Tuvo algo que ver la bolera o fue simplemente que a veces no salen las cosas?

–Un poco de todo. Un poco de no estar yo fino, evidentemente, y un poco también de que la bolera, como no estés bien, te saca de juego. En este caso a mí me ha sacado, yo creo. No me he adaptado bien. Me ha costado mucho al principio los primeros concursos, las primeras tiradas, y he jugado con mucha precaución, no he jugado suelto como me hubiera gustado.

–¿Qué le faltaba a la bolera para estar perfecta?

–Haberme adaptado yo bien.

–Llegan las semifinales y ahí empieza otro campeonato.

–Sí, era clave empezar bien. Le podía meter un poquitín de presión y a ver cómo respondía. Y así fue. Empecé con 20 y 17 en semifinales, Carlos aflojó en la primera tirada y luego no tuvo fortuna de 18 metros y acerté a comerle muchos bolos.

–¿Fue ahí en esas dos primeras tiradas de la semifinal cuando se quitó esa precaución de la que hablaba antes?

–Sí, a ver, es como todo. A medida que vas jugando, te vas encontrando más cómodo. En los primeros concursos me ha pasado así. A raya alta empecé flojo el miércoles, pero luego mejoré a raya al medio. En el segundo concurso, el jueves, lo mismo y en la fase final también. El tema es que había más concursos seguidos, ya estaba más suelto del concurso anterior y eso me ha venido bien.

–¿Recuerda haber hecho alguna vez una remontada similar?

–Yo creo que no.

–¿Gusta más ganar así o yendo por delante todo el campeonato?

–A mí me gusta ganar. A este campeonato, por la dificultad y por cómo empezó todo, le doy mucho mérito, pero me gusta ganar. Estoy muy contento. Es algo que casi que ni se esperaba después de cuartos de final, con 29 bolos abajo. He luchado y merece la pena.

–Van cuatro Nacionales seguidos, ha igualado a Joaquín Salas, el único que lo había logrado. Va tocando las marcas de los más grandes…

–No pienso en eso, pienso en el día a día. La temporada mía personal ha sido buenísima desde el principio, he hecho muy buena temporada por equipos, por parejas e individual. Creo que me merezco este campeonato por toda la temporada que llevo. Y Carlos también se lo merecía, por supuesto, Pero bueno, yo pienso en mí y creo que me lo merezco. Y estoy muy contento de haberlo conseguido.

–Al final están los mismos jugadores, pero ¿qué diferencia hay entre un Regional y un Nacional?

–El Campeonato de España es lo más grande que existe en los bolos. Es lo que todos queremos, es lo que hemos soñado desde pequeños. Si has sido jugador desde pequeño, siempre soñabas cuando ibas allí a Torrelavega, al Malecón, veías a Tete, a Salmón, a Óscar y a Rubén Haya, les veías allí ganar campeonatos con la bolera llena. Y luego les veías en la vidriera allí puestos en la foto. Y bueno, eso es lo que soñamos todos desde pequeños. Y yo creo que es lo más importante y lo que más mérito tiene de toda la temporada.

–Antes había la sensación de que Víctor González era imbatible, ahora con más motivo.

–Yo no lo pienso así. Yo pienso que si estoy a mi máximo nivel y con confianza, es muy difícil ganarme, eso sí. Pero imbatible no, por supuesto. Ya se demuestra muchos días que pierdo, evidentemente. Todos tenemos días buenos y malos y los rivales también juegan a muy buen nivel.

–¿Se ha quitado la espina de la fina perdida en Treceño en 2017?

–Sí, por supuesto. En aquel campeonato me sentí muy cómodo con la gente, me apoyaron muchísimo. Evidentemente no es como ahora, venía en otras circunstancias. Luché hasta el final y, a pesar de empezar muy mal la final, tuve mis opciones en las últimas tiradas porque acabé muy bien. Y perder en la última tirada mandando 17 bolos, pues bueno, yo acabé muy contento por cómo jugué.

-La última tarde, además, la entrada fue como la de otros tiempos.

-Después de los años después de la pandemia, que han sido un poco entradas más justas, es muy bonito ver la bolera de Valdáliga llena. Es bonito volver a ver una bolera con bastante capacidad llena, porque el año pasado también estuvo llena la de Ontoria, pero había menos capacidad.

• Temas
• Bolos