Secciones
Servicios
Destacamos
P. RÍOS
Barcelona
Sábado, 29 de agosto 2020
No hubo sorpresa ni marcha atrás. Leo Messi, tal y como informó al FC Barcelona el sábado, no se presentó este domingo por la mañana al primer día de la pretemporada 2020-21. A las 10:15 horas tenía el turno para pasar el test ... PCR del coronavirus, siguiendo el protocolo sanitario establecido por LaLiga, pero el argentino no se acercó a la Ciutat Esportiva Joan Gamper de Sant Joan Despí, por lo que se le puede considerar declarado en rebeldía, aunque parece que hacen falta un par de días más de ausencias para que ese término sea oficial legalmente.
La decisión de Messi, aunque esperada, devuelve el pulso emprendido contra el club al punto de partida, al martes del burofax pidiendo la carta de libertad para irse gratis y, a la carrera, muy posiblemente al Manchester City, con la respuesta inmediata del Barcelona defendiendo que la única lectura posible del contrato es que acaba en 2021 y que tiene una cláusula de rescisión de 700 millones.
En estos seis días se han producido vaivenes significativos que parecen confirmar que los abogados de las dos partes están improvisando sobre la marcha. Un día parece que Messi tiene la razón jurídica y al siguiente es Josep Maria Bartomeu el que parece amparado por la ley. La última demostración es lo sucedido el sábado por la noche, cuando la Ser informó que la cláusula de Messi ya no existía al haberla firmado en 2017 con motivo de su renovación hasta 2020, sin estar estipulada para la temporada adicional hasta 2021 que el Barcelona quiere hacer cumplir a Messi.
En definitiva, que el '10' podría tener contrato pero no cláusula, una versión que podría invitar a un club a ficharle ya con un transfer provisional a la espera de que un juez decidiera la cantidad a pagar, pero ya sin la amenaza de los 700 millones. El Barcelona lo negó al instante proclamando que no hay dudas burocráticas y LaLiga emitió un comunicado oficial avisando que el contrato es claro: 2021 y cláusula en vigor.
Cuesta creer ya a estas alturas que Messi pueda seguir jugando en el Barcelona aunque Bartomeu dejara el cargo, como le ofreció. Tendrán que hablar y para ello se espera ya en Barcelona a Jorge Messi, padre y agente del jugador. Por elucubrar, un traspaso por 200 millones y todos contentos podría ser una opción, ¿pero qué club querrá hacer ese gasto ahora si lo puede tener gratis dentro de un año? Eso sí, un año de Leo es mucho y ya tiene 33. Y nadie puede estar seguro de que dentro de unos meses pensará igual. Y por parte del Barcelona, pasar a la historia como el presidente que no pudo retener a Messi y que acabó negociando una venta sería casi motivo de exilio. Eso sí, ahora Bartomeu puede salvar las cuentas y evitar una posible ruina personal como avalado. Igual por 200 antes de irse... Un lío infinito.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.