El Textil Santanderina sigue en una nube

Ruth Beitia y Laura Nicholls -representada por su padre, Alfonso- eran las madrinas de lujo del partido en el Matilde de la Torre. El Textil quería honrar a quienes pasearon desde un podio en Río el nombre de Cantabria. Y la campeona olímpica y el padre de la medalla de plata pudieron presenciar un encuentro vibrante. Los melillenses explotaron sus virtudes en un primer set en el que salieron muy concienciados y dominadores, haciendo valer su efectividad en ataque frente a un Textil Santanderina algo dubitativo en su juego. Esta combinación de factores propició que el primer set fuese para el conjunto melillense por 21-25.

El aviso puso las pilas a los de José Ignacio Marcos, que saltaron a la cancha con una actitud muy diferente en el segundo parcial. Los cabezonenses dominaron desde el inicio, pero los melillenses no cejaban en el empeño hasta llegar a empatar el luminoso a 19 puntos. Las cosas pintaban muy mal para los locales cuando los visitantes se pusieron con un casi definitivo 21-24. Pero el Textil Santanderina no es el equipo timorato de otras campañas. Y en esta muchos sets los ha remontado y ganado a base de fe. Eso permitió a los de Cabezón dar la vuelta al marcador hasta un 27-25 aprovechando ciertas dudas visitantes en ataque.

Con el luminoso igualado volvió a aflorar la mejor versión del equipo cántabro, que en el tercer set se aferró a la fortaleza de Walter da Cruz Neto sobre la red. Junto a su compatriota Frank Amorim y a Víctor Bouza en los remates y a unas sufridas defensas de sus dos líberos, Ruper y Chimo, el set cayó de lado de los de casa por 25-20.

Resiste el Melilla

Pese a verse por debajo en el marcador, el Melilla no tiró la toalla y logró comenzar el cuarto set con mínimas ventajas, hasta que Frank Amorim dio con el 11-10 la primera renta a los locales, que lograron levantar al público de sus asientos en un punto en el que Víctor Brull volvió a hacer levitar sobre el parqué del Matilde de la Torre una bola imposible para que fuese Da Cruz el encargado de sumar un punto más con un bloqueo espectacular. Los cabezonenses se llevaron el set por 25-19 y cerraron así su quinta victoria de lo que va de curso. Para los que están abajo, en la cancha, otro pasito más para la permanencia. Pero para los de la grada, otro motivo más para seguir soñando con esa Copa del Rey para la que de momento, su equipo está clasificado.