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Lunes, 23 de enero 2017, 17:40
A Ruth Beitia se le está quedando pequeña la vitrina que tiene en casa para guardar los trofeos que ha logrado en su dilatada carrera como saltadora de altura. Después de un 2016 histórico en el que se convirtió en la primera atleta española de ... la historia en colgarse al cuello un oro olímpico y alzarse por segundo año consecutivo con la Liga de Diamante, la atleta cántabra se encuentra en estos momentos de gira para recoger todo lo cosechado en la pista durante los últimos años.
La última parada. Los Premios Nacionales del Deportes 2015 que se fallaron el año pasado y los ganadores tenían que pasar este lunes por Madrid a recogerlos de manos de los Reyes de España. El capitán del Barcelona, Andrés Iniesta, la selección española de baloncesto, el entrenador del Sevilla, Jorge Sampaoli y, como no, Ruth Beitia.
"Este Premio Reina Letizia es el mayor exponente del deporte, el mejor que me podían dar. Estoy feliz, sobre todo después de un 2016 que va a ser irrepetible, en el que se han cumplido todos mis sueños, aunque siempre hay espacio para otros nuevos", señalaba emocionada.
Aunque la cántabra hacía referencia en los agradecimientos a sus grandes logros conseguidos el año pasado, el premio que recogía este lunes reconocía su trayectoria durante 2015. Un año no tan perfecto como el siguiente pero casi inmaculado en el que logró su primera Liga de Diamantes y logró ser la quinta mejor atleta de Europa en pista cubierta y la quinta también del mundo.
La cántabra no cabe en sí misma cada vez que tiene que agradecer cada uno de los galardones que se ha ganado saltando más que nadie. "Me siento plena de premios, sobre todo porque son el regalo que te dan después de las grandes temporadas, con muchas horas de entrenamientos y de competición. Es un placer recogerlos", insiste.
Pero como si se tratara de un automatismo, en sus agradecimientos no puede faltar él. Ramón Torralbo, su entrenador. Siempre le atribuye la mitad de su éxito y esta vez no podía ser menos. "Es el momento más dulce de mi vida, compartido como siempre digo con mi entrenador al 50%".
También hubo momentos para las anécdotas entre tanto protocolo real. La cántabra quiso compartir con los periodistas la que tuvo ella. "Doña Leticia me ha agradecido que hubiera traído tacón bajito", comentó entre risas en clara alusión a los 1,86 centímetros de altura de la cántabra.
Al igual que con los títulos logrados, la cántabro tampoco tiene techo para soñar con seguir llenando la vitrina. "Solo la nominación es algo increíble y es un sueño pensarque me lo puedan dar". Beitia se refería a los premios Laureus como mejor deportista de 2016. A sus 37 años, la santanderina competirá con el nadador Michael Phelps; el tenista Juan Martín del Potro; la triatleta Fabienne St Louis; el jinete Nick Skelton; y el esquiador Aksel Lund Svindal.
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