«No me esperaba un recibimiento así»

Los amigos y familiares de Sergio García, más unos cuantos aficionados al boxeo, se estrenaban ayer en lides aeroportuarias. Recibimiento al campeón con cinturón retenido de forma tan brillante. En la sala de llegadas estaban Rebeca y su marido Jesús. Ella no podía estar más orgullosa. «Es que Sergio es mi primo». El sábado eran casi una decena en casa. Cena a base de picoteo y a eso de las once de la noche, clavados frente a la tele. «Teníamos muchos nervios. Pero estábamos seguros del triunfo». El día anterior hablaron con el púgil. «Y nos transmitió mucha tranquilidad», añade Jesús. Para los no familiarizados con un deporte que no es de los mayoritarios, Sergio García apunta a ser lo más parecido a un Iniesta con guantes. «Es muy humilde, y tímido. Ahora, cuando se propone algo, lo hace. Tiene mucha determinación. Pero es una persona muy sencilla. Lo que veis, es lo que es». Palabra de prima.

Por esa sala andaba también el presidente del Gobierno regional, Miguel Ángel Revilla. Amante del boxeo y conocedor de la trayectoria de Sergio desde que era un chaval. «¡Cómo que si vi el combate!», exclamó. «Dio una auténtica exhibición. Yo no he visto una pelea con tanta superioridad, ante un rival que demostró ser muy duro de roer. Y ganar allí no es fácil. Los árbitros los nombra el promotor, que era el mánager del oponente. Era un riesgo grande». Revilla augura que el recibimiento de ayer «no será el último» al chaval en Parayas. Y le agradeció «la promoción de Cantabria que ha hecho allí», con la bandera regional y la de Torrelavega «en el centro del ring del O2 Arena» de la capital británica.

Alguien comentaba al presidente que tenían preparado un recibimiento con un saxofonista que interpretaría 'Viento del norte' para Sergio. Y se identificó como Tomás Ruiz, exboxeador cántabro y olímpico en los Juegos de Seúl en 1988. «Sergio ha hecho un combate de Liga Mundial. Ha sido un orgullo verlo». En opinión de un experto, 'El Niño' se ha hecho mayor en nada. «Ha pegado un cambio técnico brutal. Y físicamente es un súper atleta». Avisa de que este éxito, «el primer campeón de Europa que tiene Cantabria», no será el último. «Podemos tener en Sergio un campeón del mundo». Ruiz aconsejaba al chaval torrelaveguense «que no se arriesgue tanto a salir fuera». «Ha hecho lo que nadie se ha atrevido, hacer una defensa así».

La llegada del avión estaba prevista para las 21.09 horas. Apenas un par de minutos después, empezaban a salir los pasajeros. Los que aguardaban a Sergio acodados en una valla empezaron la ristra de vaciles, saludando al pasajero de turno como si fuese él la estrella del evento. Hasta alguno se animó a pedir a voz en grito al presidente del Ejecutivo regional «¡unas anchoas!». Pero los ánimos se fueron desinflando un poco. Las nueve y veinte, y media, las diez menos veinte... Nada. Casi pasaba más tiempo desde que llegó el avión que lo que duró el combate que ya está para siempre en la historia del boxeo cántabro.

Los medios gráficos, que podían ver lo que se cocía en la zona de embarque, daban la señal al prepararse. Y a las 21.50 horas, se abría la puerta con las personas que todos esperaban. Sergio García y su equipo, con Víctor Iglesias al frente. El saxofonista cumplió con su cometido y Revilla se arrancó a cantar 'Viento del norte' para honrar al campeón de Europa, acompañado de todos los asistentes. Una cerradísima ovación y gritos de júbilo concluyeron el cántico.

«Lo del recibimiento me lo habían dicho, pero no me esperaba algo así». Sergio acertaba a responder a un par de preguntas, aunque era algo casi milagroso entre tanta petición de autógrafos, selfies y abrazos. Su cara denotaba cansancio a raudales por lo vivido en Londres y también ese bendito agobio de un recibimiento por todo lo alto. «Sí estoy cansado. Ahora quiero recuperar, unos días. El combate fue duro y disputado», acertó a decir antes de que otro ejército de móviles y de brazos para estrujarle le recordasen la importancia de lo que ha hecho. Historia en el boxeo cántabro.

«Quiero dedicárselo a mi familia y en especial a mi equipo: Víctor, Iñaki y Tato, que están día a día conmigo en el gimnasio. Y le quiero agradecer a todo el mundo que ha venido a verme. Gente conocida, gente de Torrelavega, gente que se gasta el dinero en moverse, en seguir y en venir a ver este deporte, que lo sigue muy poca gente. Se lo quiero agradecer y ojalá que hayan ganado mucho dinero en las apuestas». Con estas palabras SergioGarcía agradecía ya casi en la madrugada del domingo el apoyo tras defender con éxito su título en el cuadrilátero del O2 ante Ted Cheeseman.

El Ayuntamiento de Torrelavega prepara un recibimiento para su campeón de Europa.El concejal de Deportes, Jesús García, solo está pendiente de ultimar algunos detalles, y tiene previsto anunciar hoy mismo el homenaje que se rendirá al campeón de Europa superwélter. Salvo cambio de último momento, en pocas horas se sabrá si se organiza una recepción o un acto más ambicioso a quien es ya por méritos propios uno de los torrelaveguenses más ilustres. No en vano, salió al ring envuelto en la bandera de Torrelavega, un detalle que no pasó inadvertido a nadie y que le agradecían ayer los aficionados en su escala santanderina antes de llegar a la capital del Besaya. Esa ciudad que ha forjado al campeón europeo de los superwélter (versión EBU) y quizá al aspirante al título mundial en no demasiado tiempo. Por el momento ya ha alcanzado un nuevo hito en su carrera como púgil. Primera defensa.Exitosa y nada menos que en el O2 Arena de Londres. Ni siquiera apuró los plazos.Defensa voluntariademostrando su confianza, que no autocomplacencia. Y una buena bolsa.Ahora toca pensar en nuevas metas.