Secciones
Servicios
Destacamos
JOSÉ ÁNGEL GARCÍA
Gijón
Miércoles, 3 de agosto 2022, 12:27
Fernando Alonso ha decidido dar un volantazo y dejar Alpine a un lado y apostar por el proyecto de Aston Martin. Si uno atiende a los datos objetivos, cabe pensar que el piloto asturiano pierde con el cambio. No en vano deja la cuarta escudería ... de la parrilla para irse a un proyecto en construcción cuyos resultados no han sido precisamente alentadores esta temporada. Sin embargo, Alonso ve potencial en la idea que tiene Lawrence Stroll al tiempo que está un poco harto de todo lo que rodeaba a Alpine.
Una elemento que ha supeditado ese giro de los acontecimientos fue el anuncio en vísperas del Gran Premio de Hungría de Sebastian Vettel. Su abandono abrió una puerta que ha cruzado Alonso, convencido de que su plan puede tomar forma en el proyecto de Aston Martin, donde aspira a conseguir de nuevo victorias, algo que no pudo conseguir, de momento, durante su paso por Alpine.
A estas alturas de su carrera, Fernando Alonso no se mueve por dinero. Le estimula mucho más la dimensión del proyecto y, sobre todo, la capacidad que le concederá la escudería para desarrollar el coche. Sin embargo, el ovetense seguirá siendo en el equipo británico uno de los pilotos de la parrilla mejor pagados, una consideración que demuestra la cotización de un deportista y Alonso sigue siendo alguien muy valorado en la Fórmula 1.
Cobrará más que en Alpine (17,5 millones) y más que Vettel en Aston Martin (que se llevaba unos 17 'kilos'). Su salario en su nuevo equipo a partir de 2023 rondará los 20 millones. Con ello estará en el podio de los pilotos mejor pagados con vistas a la temporada 2023. Solo Max Verstappen (Red Bull) y Lewis Hamilton (Mercedes) le superan en esta clasificación. Curiosamente, son los únicos tres pilotos de la parrilla que saben cómo se gana el título mundial tras la anunciada marcha de Vettel.
Fernando Alonso mantiene su caché intacto. Su calidad, a pesar de la edad, es innegable y el impacto que tiene sigue siendo muy alto. No sigue en la F1 por dinero, sino por su ambición de volver a luchar por el título, una aspiración que, considera, tendrá en el proyecto de Aston Martin. Eso es lo que más ha influido en su decisión. La escudería británica le garantiza un contrato multianual (algunas fuentes hablan de tres años con la facultad del piloto de abandonar antes de ese periodo), algo que no estaba en la agenda de Alpine, dispuesto a ofrecerle una renovación por solo un año. La firma francesa quería la continuidad de Alonso pero tampoco deseaba cortar el paso a Oscar Piastri. El australiano fue anunciado como sustituto por parte de la escudería. Sin embargo, él mismo se encargó de negar el acuerdo. «No correré en Alpine», dijo.
¿Mejora deportiva?
Aston Martin promete estar arriba, pero la pregunta es cuándo será eso. El propósito de la escudería mira a un horizonte no muy lejano y eso ha animado a Alonso, que veía el proyecto de Alpine estancado. Lawrence Stroll, propietario de la estructura inglesa, está construyendo una fábrica en Silverstone con nuevo túnel de viento. Su idea es empezar a sumar triunfos en dos años. Un periodo que convence a Alonso.
Por si fuera poco, están las sinergias con Mercedes. Hay un acuerdo tecnológico entre ambas compañías y un ejemplo de ese entendimiento es que Toto Wolff, jefe de la escuadra dominadora de la era híbrida, también es accionista de Aston Martin. El trasvase de tecnología ya dio buenos resultados en 2020, con varios podios para Stroll y una pole y una victoria de Checo Pérez.
La escudería británica sabe donde están los puntos débiles del AMR22, el primero de la era efecto suelo, podría dispararles en rendimiento en 2023, una vez solucionados los problemas de eficiencia, como le ha sucedido al Mercedes W13.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.