Cuatro etapas para la meta

Con este escenario y el espaldarazo anímico que ha supuesto el triunfo ante el Elche para un equipo que corría el riesgo de caerse en lo físico y lo mental, el Racing afronta cuatro partidos ante adversarios teóricamente asequibles, bien porque cuando se vean las caras con los montañeses no se jueguen ya nada o bien porque se encuentran en la zona baja de la clasificación.

Este último dato resulta engañoso o al menos incompleto, puesto que el Racing ha ofrecido su mejor rendimiento ante los grandes de la categoría, especialmente en los Campos de Sport, y se ha visto sorprendido en casa por los modestos, con las derrotas ante el Cartagena y el Alcorcón, que visitaron Santander ocupando puestos de descenso, como mejores ejemplos. Aun así, el calendario es a priori propicio, salvados ya todos los duelos frente a la mitad de cabeza de la Segunda División.

Independientemente de sus propios resultados, los verdiblancos se verán necesariamente beneficiados por una serie de enfrentamientos directos entre los equipos de cabeza en los que es seguro que algunos de los aspirantes al play off se dejarán puntos. El empate de Sporting y Espanyol deja al Racing en la sexta posición, empatado a puntos con el Oviedo (quinto) y el Elche (séptimo).Una victoria gijonesa le hubiera aupado a la quinta plaza en virtud del cuádruple empate, pero la verdadera referencia, los puntos, se mantienen inalterados.

El primer envite del Racing será este mismo sábado a las 14.00 horas frente al Mirandés. En el partido de ida los verdiblancos empataron sin goles en Anduva y la temporada pasada la victoria de los burgaleses por 1-2 en los Campos de Sport precipitó la destitución de Romo.

Este fin de semana ha caído 0-1 en Miranda frente al Real Valladolid, pero sigue en puestos de permanencia, con tres puntos de renta sobre el descenso. Tiene una recta final que le permite depender de sí mismo para mantener la categoría, el objetivo trazado por los burgaleses desde que empezó la temporada.

Uno de los grandes peligros que deberán vigilar los de José Alberto es Carlos Martín, joven goleador cedido esta temporada por elAtlético de Madrid, con el que ha llegado a debutar ya en Primera División, y que este curso suma quince tantos.

También se encontrarán los verdiblancos con Ramón Juan, el portero que Guillermo Fernández Romo quiso fichar para el Racing en verano de 2021 y que finalmente optó por el Mirandés cuando el acuerdo parecía completo. En Anduva se ha consolidado y es uno de los puntales del equipo. Después del Racing tiene otro rival que busca el play off, el Elche, para cerrar la competición ante dos adversarios directos por la permanencia: Albacete y Amorebieta, con el que cierra en casa la Liga.

Hace escasas jornadas elHuesca parecía tener la permanencia encarrilada. De hecho, es por presupuesto uno de los equipos teóricamente llamados a estar en la zona tranquila, pero ha entrado en una maña dinámica que le ha lastrado hasta el 18º puesto, con uno solo de ventaja sobre el descenso. Esta semana ha perdido con el Oviedo, lo que le ha complicado la clasificación y este fin de semana visita el Martínez Valero, con lo que a menos que dé la sospecha en Elche llegará al partido frente al Racing muy necesitado de puntos.

Tiene en la seguridad defensiva su gran recurso: ha encajado solo treinta goles en toda la temporada, pero a cambio le cuesta marcar y no rentabiliza demasiado bien sus goles. Cuenta en sus filas con el exracinguista Enzo Lombardo, pero el mediapunta apenas está teniendo protagonismo.

Ha vivido una temporada complicada. Ya en la décima jornada destituyó al Cuco Ziganda y la llega al banquillo de Antonio Hidalgo permitió en un principio enderezar el rumbo, pero la temporada se le está haciendo larga. De hecho, ha perdido sus cuatro últimos partidos y no gana desde el 24 de marzo, cuando se impuso 3-0 al Burgos. Será el penúltimo desplazamiento verdiblanco y cabe la posibilidad de que se convierta en el último partido de la competición regular con algo en juego. Y es, al mismo tiempo, el rival en peor dinámica que resta.

Por plantilla y objetivos a principio de temporada podría ser el rival más complicado que resta, pero al menos a priori la situación invita a pensar que no será así. Salvo absoluta catástrofe los aragoneses, no se jugarán ya nada cuando visiten los Campos de Sport en la última jornada de Liga, mientras que un Racing muy sólido como local –curiosamente solo ha fallado ante equipos que llegaban en descenso– puede estar en plena pugna por el play off, a poco que sume puntos en las dos jornadas anteriores.

Liderado por Maikel Mesa, que está aportando juego y goles desde el centro del campo, el equipo atraviesa un curso muy convulso. En la jornada 16 destituyó a Francisco Escribá, sustituido por un JulioVelázquez que solo aguantó catorce partidos en el banquillo. Tras el segundo despido el club echó mano de un clásico enZaragoza: Víctor Fernández.

El relevo pareció surtir efecto, pero en las últimas jornadas elZaragoza se ha vuelto a mostrar muy irregular, y ayer cayó en casa ante el Burgos, uno de los rivales verdiblancos en la carrera por la fase de ascenso. Ya en la primera vuelta el Racing consiguió llevarse un punto de La Romareda, y si efectivamente los maños llegan aSantander sin nada en juego –necesitan al menos una victoria más– los cántabros serán necesariamente favoritos ante su público.

La gran incógnita, y tiene mucha trascendencia, es si para la última jornada el Villarreal B, hasta su goleada al Sporting en El Molinón colista de la categoría, estará ya descendido cuando el Racing le rinda visita o si por el contrario conservará todavía opciones de mantener la categoría. Hace apenas un mes y medio parecía desahuciado, pero tres victorias en cuatro jornadas le metieron de lleno en la lucha en una progresión que se vio cortada el viernes con su derrota por 0-3 ante un Levante que se resiste a renunciar al play off.

En caso de que el Racing se juegue el play off no se puede descartar que el club decida abrir La Cerámica, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, para propiciar un desplazamiento masivo de la afición. En principio parece complejo que se organice un viaje tan largo e incómodo como el que supone viajar a la ciudad castellonense desde Santander, pero la masa social verdiblanca ya lo barrunta, siempre que se den las circunstancias propicias. Como corresponde a un filial –el único de la categoría–, cuenta con una plantilla de gran calidad, con algunos jugadores que ya han tenido la oportunidad de comenzar a foguearse con el primer equipo, pero de escasa experiencia. Su máximo peligro es Álex Forés, que suma ya 16 goles en Liga, solo dos menos que Peque, a pesar de los malos resultados de su equipo.

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