El Extremadura no se presentó en Ferrol y queda descalificado

El equipo entrenado por Manuel Mosquera tenía que haber viajado hasta Ferrol. El autobús que se encarga de trasladar al equipo en los partidos de fuera de casa se presentó en la Ciudad Deportiva de Almendralejo, pero allí no había nadie. Los jugadores estaban ejerciendo su derecho a huelga.

El choque que disputó el conjunto azulgrana la pasada semana ante la Cultural Leonesa será así el último en su historia. El Extremadura quedará apeado de la competición por su segunda incomparecencia a la par que se desarrolla el proceso de disolución impuesto por el Juzgado de lo Mercantil por incumplir en reiteradas ocasiones el plan de viabilidad que el club, en proceso concursal, presentó en su momento.

Esta situación se vio venir desde el jueves, cuando los jugadores anunciaron que convocaban una huelga durante este fin de semana si no llegaba el dinero para que el club cumpliese las promesas que les había hecho. La plantilla firmó esa huelga y ya el viernes no se presentó al entrenamiento. La segunda incomparecencia acelerará la desaparición del club.

Ni primer equipo ni filial podrán seguir compitiendo esta temporada en sus respectivas competiciones. El Extremadura descenderá a Segunda RFEF y no podrá volver a ascender a Primera RFEF en las dos próximas temporadas desde su descenso, algo que por otra parte queda solo en anécdota, dado que salvo sorpresa mayúsucula el club desaparecerá en cuestión de días o semanas.

La descalificación de los azulgranas deja a la Federación Española en una complicada situación, puesto que tome la decisión que tome habrá terceros perjudicados. Ha descartado anular todos los partidos de los extremeños y tampoco baraja la posibilidad de anular solo los de la segunda vuelta. Su plan inicial cuando se comenzó a vislumbrar el problema era darle todos los partidos por perdidos, y esa es la opción que tiene más cuerpo. No será, sin embargo, por 0-3 o 3-0, como ocurre en los casos de incomparecencia, sino que se establecerá un coeficiente de goles a favor o en contra –falta por confirmar si en toda la temporada o, como parece más probable, en la segunda vuelta– y ese será el resultado que marque la victoria de cada uno de sus rivales.

Entre ellos está el Racing, que por lo tanto tiene tres puntos más asegurados, al igual que el Deportivo. El caso de los verdiblancos es más particular, puesto que debían medirse a los extremeños en la última jornada, que el Racing no disputará. De confirmarse que se da a todos los equipos por ganadores, los de Guillermo Fernández Romo tendrá la victoria asegurada en la última jornada de competición regular.