Guille Romo: «Ha sido el partido más sólido fuera de casa hasta ahora»

Pese a su exigencia, lo cierto es que no hay duda de que lo que planeó durante la semana le surtió efecto. «Los planes siempre han de adaptarse a las situaciones que tenemos; hemos llegado sin Cedric, hemos puesto a Manu y ha marcado, ha salido Jack y ha marcado, no hemos sido egoístas con Pablo Torre y hoy tocaba protegerle...». Y además Soko regresó y cumplió, Marco Camus salió y revolucionó. Todo.

Guille Romo admitió que «hay que estar satisfechos», sin embargo repitió que desde la cautela porque «hay que ver cómo está la Liga. La UD Logroñés se ha dejado puntos en el campo del último... Hay que tener felicidad pero calmada». Sea como fuere, lo cierto es que el Racing ganó una vez más haciendo lo que sabe.

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El entrenador racinguista reconoció que el de ayer fue el partido más sólido «fuera de casa». Romo aseguró que «en Santander hemos hecho partidos que no hemos ganado pero tuvimos la sensación de que podíamos ganar, pero fuera sí podemos decir que en solidez ha sido el mejor». Y es que para el técnico «las tres derrotas que hemos tenido han sido a domicilio y fueron por conceder más de la cuenta».

Marco Camus fue suplente pese a los méritos que había hecho para ser titular. Romo indicó que «todos nos lo ponen difícil. Hay veces que puedo ser injusto con uno, pero trato de no serlo con el equipo. Quería tener un revolucionador en el banquillo». Y acertó. El canterano salió y mató el duelo. El que regresó al once inicial fue Soko, que para el entrenador «fue de los mejores». El camerunés. Según Romo « estuvo intensivo, a veces desacertado pero ha obligado a defender bajo al Zamora y necesitábamos un revolucionador y lo hicimos con Marco Camus». En cuanto a Manu Justo, «yo sé -añadió Romo- que si mete gol está mejor aunque no lo parezca. Cuando eres delantero es así».

Sobre Satrústegui, el míster recordó que «ya le dije el jueves que iba a jugar de central porque el Zamora mete mucha gente por dentro y quería que jugase ahí». Y así fue, y por tanto, «la idea era dar continuidad a la gente joven y pusimos a Simón. Ha estado bien y me alegro por él».

Finalmente, el técnico no quiso ver que el Racing esté en su mejor momento. «No quiero ni ser humilde ni soberbio. La idea es que la plantilla crezca con esa edad media que tiene de tan solo 24 o 26 años. No hay que estar ni mejor ni peor, sino que hay que buscar el equilibrio».