José Alberto: «Estamos más cerca de un objetivo muy bonito, pero a la vez muy difícil»

Sabe que el entorno aspira ya a algo más, como se lo hizo saber la grada coreando el 'Sí se puede', y pese a intentarlo no puede abstraerse de ello. «Es normal que la gente se ilusione; todos nos ilusionamos, pero tenemos que seguir nuestro camino. Ahora tenemos que pensar en competir en Ferrol como lo hemos hecho este sábado en la segunda parte, y si hacemos eso estaremos más cerca de sumar y de un objetivo precioso y muy bonito, pero a la vez muy difícil. Lo dije en la previa: hay muchísimos equipos metidos en la pelea –por el play off de ascenso– y nosotros vamos a ser uno de ellos. Con 42 puntos tenemos que remar muchísimo para poder estar con los mejores».

«Nos quedan catorce semanas super bonitas por delante, y vamos a ver hasta dónde podemos llegar», resumía con dos frases que ilustran la situación del equipo: la meta de mínimos virtualmente cumplida y un entrenador que sabe que el salto de calidad es posible, pero consciente a su vez de lo complicado del reto ante equipos con más puntos y con mayor presupuesto. El compromiso de este sábado fue un ejemplo; el de un Racing que se tiene que exprimir hasta el extremo para mantener el ritmo que exige la zona noble. «Necesitamos ir al límite, porque si no, no nos da», repetía en lo que se ha convertido casi en un mantra. «En la primera parte –analizaba– hemos sufrido. Estábamos desajustados, pero hemos conseguido mejorar y a nosotros equipos como este, con mucha ida y vuelta, nos dificultan». Aun así el Racing amarró una trabajada victoria: «Acabamos con el gancho; extenuados, pero así debe ser», añadía.

Todo después de derrotar al líder en un contexto además complicado; cuando el Leganés se había puesto por delante. «Es muy difícil ganar un partido como este y remontar a un equipo que ha sido de los mejores que ha pasado por Santander y que ha sido mejor que nosotros en muchos momentos, sobre todo en los primeros 30 o35 minutos, pero en la segunda parte, sin estar muy brillantes o fluidos, hemos competido muy bien», reflexionaba.

Todo dependerá de lo que suceda en los próximos compromisos. «Destacaría la fortaleza mental del equipo. Hemos tenido actitud ganadora y de competir, pero tenemos que seguir mejorando como bloque», señalaba como receta para el desplazamiento del sábado a Galicia, donde esperará un Racing de Ferrol que visita hoy al Eldense y que ocupa plaza de fase de ascenso. Enviaba, en resumen, un mensaje optimista pero también de calma y con los pies en el suelo: «Ya sabéis que entiendo que el fútbol se abre hacia muchas cosas, que es un espectáculo y que hay que disfrutar de ciertos momentos, pero todavía nos toca centrarnos en el trabajo».

Eludió referirse a González Esteban, muy protestado este sábado: «Es un partido muy complicado de arbitrar, porque el Leganés va al límite. Por eso es tan buen equipo. Aparte de que tiene capacidad y talento para jugar, va y te lleva al límite. Compite todos los balones; todas las jugadas las ensucia. Tiene muchísimas piernas para apretar, robar y chocar».

Restaba así importancia al arbitraje, en especial cuando no incidió en el resultado: «Es un partido realmente difícil. Tendré que verlo y valorar las decisiones que nos hayan podido beneficiar y perjudicar, pero creo que arbitrar es muy complicado», decía en tono conciliador.

Se preguntó al asturiano por su jugador franquicia y no dudó en alabarle, pero su favorito era anoche otro: «Íñigo Vicente es un jugador muy importante para nosotros. Sus datos están ahí y demuestran su capacidad y talento, pero hoy me gustaría destacar a otros que están más en la sombra». Se refería a quien se ha convertido en su mediocentro de cabecera: «Íñigo, el capi, ha hecho un auténtico partidazo y creo que es justo reconocerlo. Parece que siempre los trabajadores, los que están en la sombra, no destacan, pero él ha tirado del equipo en los malos momentos y ha sabido equilibrarlo. Para mí, ha sido el mejor», concluía.