En manos de un equipo joven, con hambre y con mucho que demostrar

La apuesta del Racing para este curso es la combinación de experiencia y juventud, un dúo que siempre es arriegado si se busca el objetivo más ambicioso. La importante reducción que la propiedad ha impuesto al presupuesto en este segundo intento de regresar al fútbol profesional ha obligado a explorar nuevos mercados y a tomar decisiones que sólo el tiempo podrá juzgar con rigor. Así las cosas, la comisión deportiva, comenzó a trabajar allá por el mes de julio con una premisa fundamental: buscar futbolistas jóvenes y se descarta los cedidos. Y bien es cierto que los responsables no se han desviado de la directriz. De los nueve futbolistas que se han incorporado a la plantilla, ninguno supera los 26 años y salvo la llegada de Adrián Balboa, a préstamo desde el Belgrano de Argentina, del que el Racing se reserva una opción de compra, todos han firmado un contrato en propiedad. Con algunos, el club ha realizado una apuesta más duradera, caso de Álvaro Bustos, Ismael Benktib, Albereto Villapalos, Patrick Soko o Cedric, a quienes se les ha estampado un contrato duradero y con la intención de que se formen en el club y puedan aportar un valor añadido. Con Pablo Andrade, Joan Maynau e Isaac Nana, los jefes han preferido acotar la relación y convertir esta temporada como un curso de prueba.

Los fichajes, los nueve, han reforzado todas las posiciones del equipo, despues de la espantada generalizada tras el desastre deportivo que se produjo con la plantilla de la temporada pasada. Tan solo la portería -donde se apeló a la continuidad de Iván Crespo y se renovó al cántabro - y la del lateral derecho han sido las posiciones en las que el club ha decidido no incorporar a nadie. Ceballos y Mantilla, dos chavales de la casa, para quienes la pretemporada ha sido una selectividad, se disputarán el puesto. E ellateral izquierdo, con Andrade y Maynau se ha apostado por un futbolista de corte ofensivo y otro defensivo. Dos jugadores jóvenes y con experincia en la categoría. En el puesto de central, a la experiencia de Figueras y Gil, la prioridad era añadirle otro y no ha sido así. La posición se queda coja.

Para el centro del campo, después de que durante las últimas temporadas se haya adolecido de futbolistas creativos, la dirección deportiva ha traído a Ismael Benktib, un futbolista de toque y calidad, irregular en su trayectoria, pero del que se espera asuma responsabilidad. Los otros dos pivotes son Villapalos y Nana, precisamente dos futbolistas con vocación defensiva y de contención. Con los tres, además de la irrupción de Martín Solar, el canterano cuyo descaro le aporta más madurez de la que dice su carné de identidad, Rozada puede tener un abanico de posibilidades bien amplio. Para las posiciones de ataque, el equipo tendrá perfiles variados. Por un lado, Bustos, un futbolista de calidad llamado a marcar diferencia que conoce la categoría. Y por otro, dos futbolistas desconocidos y de los que se espera den un plus de trabajo y acepten el reto de venir al Racing para darse a conocer, Soko y Balboa. La incorporación más llamativa es la de Cedric, que además ha firmado dos temporadas, cuyos registros goleadores invitan al optimismo.

El otro pilar en el que se basará este intento de ascenso es la cantera que después de unos cuantos años vuelve a recuperar el protagonismo que las decisiones puntuales e interesadas arrebataron. Ceballos, Mantilla, Martín Solar, Iñigo Saiz-Maza, Marco Camus y Pablo Torre. Estos dos últimos pueden estar ante su oportunidad de demostrar todo lo que se espera de ellos y que la pretemporada ha evidenciado. Sin ser canterano, pero sí de la casa, Javi Siverio por fin tendrá vía libre.

El objetivo es el más ambicioso que hay en esta modesta categoría y por ello, el cuerpo técnico sabe que no podrá exijir todo el peso del mismo a los chavales de la cantera, pero sí la dosis necesaria. La tercera de las patas en las que se apoya esta plantilla son los tres futbolistas que repiten del año pasado: Jordi Figueras, Álvaro Cejudo y Jon Ander. Los dos primeros fueron de lo poco que se salvo dentro del naufragio, de hecho Cejudo sorprendio por su grado de implicación pese a su trayectoria. Ahora, en Segunda B, todo son dudas; la sombra de la herencia de la anterior dirección deportiva planea sobre ellos.

Nueve fichajes. Dos laterales, tres mediocentros, dos extremos y dos delanteros. Faltó el central que desde el mes de julio buscaba la dirección deportiva y al final no llegó. Hasta útima hora del lunes se esperó en El Sardinero a que sonara el teléfono para cerrar la contratación del zaguero, pero nocurrió. El Racing se queda así con una ficha libre que podrá ocupar en el mercado de invierno si lo estima oportuno. Nueve caras nuevas, cuatro futbolistas que repiten de la temporada pasada y el resto canteranos. El club se encomienda a una plantilla joven y con ganas de demostrar para reresar a la LFP.