Once jugadores con contrato en caso de descenso

Evidentemente, no es lo mismo mantenerse en el fútbol profesional que volver a caer al pozo. La Segunda División aumenta los ingresos, el nivel de los futbolistas necesarios y el interés de los jugadores por continuar. Y en el caso de aquellos miembros de la plantilla que tendrá el Racing con contrato en vigor el próximo 30 de junio, algunos tal vez no deseen dar un paso atrás en sus carreras deportivas o sus salarios sean absolutamente prohibitivos en una categoría inferior. Unos cuantos contratos deberían negociarse a la baja, si es que es posible.

Pase lo que pase, los días de Chuti Molina como director deportivo del Racing están contados, pese a que el manchego tiene una cláusula de renovación automática en caso de una hipotética permanencia. Por eso, no tiene sentido que se pongan manos a la obra en la preparación del próximo curso. Y, como los patrones del club están convencidos de que no deben gastar más dinero de la cuenta en un despido del máximo responsable del área técnica, han decidido esperar. Además, la continuidad de José Luis Oltra en el banquillo estará más que probablemente supeditada a la salvación racinguista, por lo que el puesto de entrenador también está en el aire.

El Racing cuenta a día de hoy con nueve futbolistas cedidos por otros clubes, que terminarán su vinculación con el cuadro cántabro el próximo 30 de junio. Y en caso de descenso, será poco probable que se prolongue alguna de esas estancias, más allá de que algunos de esos futbolistas no han cumplido con las expectativas. Luca, Enzo Lombardo y Manu Hernando están siendo los más destacados. Los dos primeros, en Segunda, es difícil, pero quién sabe. En Segunda B, quizá el club podría solicitar una prórroga con Manu Hernando, aunque no es más que una conjetura. Carmona tampoco sería descartable, pero su posible participación en los Juegos Olímpicos le pueden servir de escaparate. Dani Toribio, Moi, Nkaka, Borja Galán y Papu volverán a sus clubes de origen.

A ellos hay que unir a los futbolistas que terminan contrato, que son siete. Todos ellos con casos muy diferentes. Si el Racing no logra la salvación, hay tres que quizá podrían continuar. Por ejemplo, Iván Crespo. Tiene 35 años y probablemente su deseo sea terminar su carrera en casa, pero no es del gusto de Chuti Molina y hasta que el manchego no abandone su despacho probablemente no haya novedades al respecto.

Por su parte, Olaortua no ha llegado a asentarse en Segunda, pero sí que demostró el pasado curso ser un jugador válido para la categoría inferior. Si ambas partes están de acuerdo, podrían llegar a un entendimiento. Igual que en el caso de Nando García, recién llegado en enero. Está teniendo un buen rendimiento y si el jugador está dispuesto a bajar un escalón, puede ser una buena pieza para el puzle.

Con quien el club no ha llegado a un acuerdo para renovar es con Buñuel. Pese a su mal rendimiento esta temporada, sus convocatorias con la selección sub 21 han subido su caché y abandonará el club en busca de cotas mayores.

David Rodríguez termina su contrato el 30 de junio. No ha dado el nivel para Segunda División y su salario es completamente inviable en caso de descenso. Así pues, su salida está prácticamente hecha en cualquiera de los casos. Similar a la situación de su tocayo Barral, que tampoco continuará.

Y de los futbolistas que han jugado algún minuto este año, Tresaco -único jugador del filial junto a Lucas que ha participado- también finaliza contrato. Apuesta personal de Chuti Molina, el club aún no ha anunciado una propuesta de renovación del aragonés. También termina su estancia en el club el máximo goleador del segundo equipo, Javier Siverio. No ha contado ni para Ania, Oltra ni Cristóbal, pero es uno de los más demandados por la afición. No es del gusto del actual director deportivo y aún no ha recibido oferta de continuidad.

A todos ellos se les podría añadir un Guillermo, recién llegado en enero, que, aunque ha firmado una vinculación hasta 2022, el documento que le une al Racing tiene una cláusula liberatoria en caso de descenso. Otra cosa sería que, en esa hipotética situación, ambas partes acordasen mantener su unión.

Así pues, con el caso variable de Guillermo, en caso de permanencia el Racing contaría con doce futbolistas con contrato y en el peor de los escenarios, con sólo once. En la portería está Lucas Díaz. El joven guardameta del filial tiene aún un año de vinculación y puede ser un complemento en Segunda o un arquero interesante para Segunda B.

De la defensa, en principio, seguirá Jordi Figueras. El catalán, que tiene un año más de contrato, mostró el pasado martes su interés por continuar pase lo que pase. Aunque, lógicamente, sus emolumentos son altos, tras el ascenso, si el Racing no logra la permanencia.

Distinto es el caso de Alexis. El veterano central no ha rendido. Y aunque tiene una temporada más plasmada negro sobre blanco, ni ha dado el nivel para Segunda ni un Racing en Segunda B estaría en disposición de hacerse cargo de su salario.

En el doble pivote, la continuidad de Mario Ortiz es viable, con un año más de vinculación con el club. También la de Kitoko, aunque las continuas lesiones del futbolista congoleño podrían llevar al club a buscarle una salida. En dos campañas, apenas le han podido sacar rendimiento a un futbolista que apuntaba a importante.

Sergio Ruiz renovó hasta 2022. Es uno de los principales valores del club y en Segunda volvería a ser uno de los pilares del equipo. Pero en caso de caída a los inviernos, la progresión del futbolista y la posibilidad de sacar algún rédito económico por parte del club complican su continuidad.

De los cinco extremos que tiene la plantilla actualmente, el único con contrato para la temporada que viene es Nico Hidalgo. No ha brillado en Segunda División, pero sí hizo una buena campaña un escalón más abajo. Mientras tanto, un jugador clave como Cejudo ha renovado de forma automática recientemente tras cumplir 25 partidos y ha mostrado su intención de retirarse en Santander.

En cuanto a la delantera, Jon Ander es el único con contrato en vigor para el próximo curso. A todos ellos se les sumaría el portero Jagoba Zárraga. Cedido en el Rayo Majadahonda, tiene firmado hasta 2022, aunque, ya sea en Segunda o Segunda B, parece poco probable que pueda hacerse con un hueco en el equipo.