Pendientes del aductor de Pablo Torre

La culpa la tuvo un trabón inoportuno de su bota derecha en el césped. El futbolista, sin que nadie le entrase o le ofreciera oposición, hizo un gesto diferente, con tan mala fortuna que su pie se enganchó con la hierba y le produjo un tirón en la zona del aductor. El de Soto de la Marina, al instante, notó el dolor localizado y se detuvo. Puede ser un tirón, una elongación o simplemente un susto. Pero también puede que la fatalidad se cebe con el joven jugador y el lance acabe en una rotura de fibras que le obligue a parar cuando mejor está. Pablo Torre salió andando de La Albericia, pero es evidente que el susto estaba metido en el cuerpo.

Ayer se sometió a las pertinentes pruebas médicas para conocer el alcance de su dolencia y salir de dudas. Quedan siete semanas de competición y es evidente que una lesión supondría un contratiempo personal muy importante y a nivel colectivo de difícil reparación. Si lo ocurrido ayer no queda en un susto, la ausencia de Pablo Torre en estos instantes pasa por ser uno de los problemas deportivos más profundos que podría afrontar el Racing, dada la importancia que ha adquirido en el equipo y, por supuesto, la dependencia que de una u otra manera tiene el vestuario de su juego. Una rotura de fibras, en función del grado de importancia de la misma, podría suponer tres semanas, cuando menos, pero si realmente es severa, podría dejarle fuera de combate casi hasta final de temporada. Este último escenario es el más tremendista, pero Manu Justo puede ser el ejemplo más cercano; el gallegó cayó lesionado en el bíceps femoral el 14 de marzo y va para cuatro semanas en el dique seco. De hecho, de los tres futbolistas que ocupaban la enfermería -Marco Camus, Arturo y Manu Justo- el vigués es el único que está ya descartado para el duelo del próximo domingo en Madrid.

Así las cosas, el racinguismo queda pendiente de lo que pueda ocurrir con su estrella y más aún Guillermo Fernández Romo, que de confirmarse la baja del de Soto de la Marina tendría que reinventar la zona de la mediapunta con varios futbolistas que han jugado en esa demarcación tocados. Es pronto para adelantar acontecimientos, pero en el caso de que Pablo Torre no pueda estar, su teórico sustituto, Arturo, está en el aire y acelerando su recuperación. Sin el murciano disponible y con Manu Justo descartado, el turno pasaría o bien a Sergio Marcos o bien a Borja Domínguez. Uno de los dos cogería la vacante del cántabro en Villaviciosa de Odón ante el Dux Internacional, el primer compromiso liguero, y luego ya se verá.

Ayer, como es lógico, no dio tiempo a probar nada, puesto que el percance que acabó con Pablo Torre en el banquillo fue en medio del entrenamiento y no modificó los planes del cuerpo técnico. Sin que fuera una lesión la que propiciase el debate, en esta misma tesitura se vio ya Guillermo Fernández Romo la pasada semana cuando el equipo viajó a San Sebastián de los Reyes. En aquella ocasión, el míster no pudo contar en toda la semana con Pablo Torre, concentrado con la selección española sub 19. Además, el posible cansancio del cántabro tras la exigencia internacional motivaba una probable suplencia en el Municipal de Matapiñonera, para lo cual Romo barjó un par de opciones: Sergio Marcos o Borja Domínguez. Más remota aparecía la posibilidad de que repitiese Yeray, a quien le tocó la difícil tarea de sustituir a Pablo Torre la semana anterior en El Sardinero ante la SD Logroñés.

La opción del cántabro no es la prioritaria, y menos a domicilio, para el domingo. En cualquier caso, a partir de hoy y en función de lo que arrojen los resultados de las pruebas del de Soto de la Marina, el cuerpo técnico maniobrará para un lado u otro. El equipo está en un momento dulce y hasta la fecha se ha sobrepuesto de un modo más que notable a la ausencia de su futbolista estrella siempre que fue necesario.

Lo de Pablo Torre ayer condicionó la sesión. Sin embargo, hubo más sobre La Albericia, aunque bien es cierto que cada vez el equipo entrena menos tiempo y con menos intensidad en un intento de no sobrecargar a los jugadores y mantener el estado de forma por el que pasan en estos momentos. La sesión se extendió por espacio de una hora y diez minutos y no se diferenció de otras tantas; la jornada acabó con un partidillo en el que sí se pudo comprobar la intensidad con la que cada futbolista busca un hueco en el equipo. No hubo ensayos tácticos más allá de que no se necesitan para confirmar que regresará Pol Moreno al centro de la zaga. Quizás la única duda que no se desveló ayer y que, a buen seguro, tampoco se sabrá hasta el domingo es la del inquilino de la banda izquierda. La recuperación de Marco Camus puede suponer que Álvaro Bustos pierda su condición de titular, pero quizás sea pronto tras dos semanas lesionado.

Al término del entrenamiento pasó por la sala de prensa de La Albericia Javi Vázquez, que aseguró que se ofrece para «jugar tanto de lateral como de extremo si el míster quiere contar conmigo». Desde que llegó el defensa en el mercado de invierno el Racing no ha perdido, aunque insiste en que «sería un error pensar que está todo hecho». El futbolista está tomando peso, hasta el punto de que incluso tiró una falta en San Sebastián de los Reyes. «Es complicado venir a mitad de temporada, pero estoy preparado para lo que pueda pasar». Vázquez también podría ser una alternativa en el extremo de la banda izquierda.