El Racing, ante un maratón de cinco partidos en 16 días

De confirmarse esas dos nuevas fechas, la maratón comenzará este domingo a mediodía con la visita del Badajoz, un equipo en crisis e incluso en riesgo de desaparición por sus problemas económicos, que arrastra impagos a sus futbolistas y que ocupa la zona media de la clasificación, si bien a principio de curso su presupuesto le colocaba como teórico aspirante a buscar la fase de ascenso.

Acto seguido, y siempre a falta de que la Federación dé luz verde, el Racing deberá desplazarse a La Coruña para jugar el miércoles 16 ante el Deportivo, líder de Segunda RFEF y máximo candidato al campeonato y, por lo tanto, al ascenso directo. Los gallegos tienen el mayor presupuesto de la categoría con una holgada renta respecto a sus perseguidores, como les ocurre también en la clasificación.

A continuación deberá visitar el Reina Sofía para medirse a otro de los equipos que compite por la fase de ascenso, aunque en las últimas jornadas ha bajado ligeramente su rendimiento: el Unionistas. Será, en este caso sí en horario definitivo, el sábado 19 a partir de las 19.00 horas en el segundo partido consecutivo entre semana.

Cuatro días tendrán los de Romo para recuperar y preparar el siguiente duelo, si es que finalmente tiene lugar en la fecha que manejan ambos clubes. Será el miércoles 23 en los Campos de Sport ante la Cultural, un equipo del que se esperaba algo más a principio de curso y que transita ahora por la zona intermedia del grupo.

Por último, el domingo 27 está prevista la visita al Stadium Gal de Irún, también en El Sardinero, lo que al menos evitará que los futbolistas acumulen más viajes, pero de nuevo ante un adversario que ha ocupado puestos de play off de ascenso durante buena parte de la temporada.

En total, cinco partidos en 16 días, siempre que se confirmen las intenciones de Deportivo, Racing y Cultural y que no se produzcan nuevos casos de covid que obliguen a nuevos aplazamientos, una hipótesis que dados los antecedentes no se puede descartar en absoluto.

El Badajoz, próximo rival del Racing, vive una situación cada vez más complicada. «La esperanza la cogemos con alfileres, llevamos siete meses de promesas y de situaciones que cambian de un momento a otro», decía el viernes su entrenador, Óscar Cano.

El sorpresivo anuncio del empresario Daniel Tafur de su retirada de las negociaciones para entrar en el club ha vuelto a precipitar esta semana los acontecimientos, generando aún más tensión e incertidumbre, que han incidido, una vez más, en la preparación deportiva. «De los tres días de entrenamientos, el que menos se ha retrasado ha sido hoy, media hora, el miércoles fueron dos horas y media. Cuando salen al campo la predisposición es absoluta, porque su integridad está a prueba de bombas, pero el resto del tiempo de lo que se habla es de una serie de necesidades que siguen sin cubrirse. No hay más cambios. Nos aburre hablar de esto, pero es algo que nos afecta a todos directamente», reconoce el técnico.

Uno de esos encuentros fue con representantes de la AFE, en hilo directo con la plantilla blanquinegra para conocer de primera mano la evolución de la situación, pero el sindicato de futbolistas no es la solución a los problemas económicos del club pacense.

Otro síntoma de los problemas del Badajoz es que no solo no ha hecho ningún fichaje en la ventana invernal –no tenía con qué pagarlos–, y al contrario ha perdido a dos efectivos: Sergio Benito y Barri, que desde hace varias jornadas habían desaparecido de los onces, según se indicó en su momento por las dificultades anímicas que, como otros miembros de la plantilla, han atravesado.