El Racing quiere al oviedista Edu Cortina y confía en que el club lo deje salir cedido

En principio, el Oviedo está dispuesto a que el futbolista salga. Ayer, fuentes cercanas al club carbayón aseguraron a este periódico que no entra en los planes iniciales de Cuco Ziganda, sin embargo también ayer disputó un amistoso con el primer equipo ovetense y Cortina disfrutó de minutos. Desde Oviedo no descartaron en ningun momento la operación, pero mismo ahora toca esperar.

El futbolista es uno de los canteranos de mayor calidad de los últimos años en el club vecino, sin embargo la pasada temporada vio como se frenaba esa proyección que apuntaba por una inoportuna lesión antes del confinamiento. Cortina, uno de los principales artífices del ascenso del filial con Rozada en el banquillo asturiano, apenas pudo participar en once partidos en Segunda División. El Racing no es el único de los equipos que se han acercado a Arnau, director deportivo del Oviedo, y al entorno del futbolista. El Racing confía en que la buena relación entre el futbolista y el entrenador del Racing, Javi Rozada, influya para que Cortina pueda decantarse por jugar en los Campos de Sport de El Sardinero.

A la secretaría técnica verdiblanca le toca esperar, pero no sólo por la decisión del asturiano sino en la gran parte de operaciones que tienen abiertas a expensas de que el mercado vaya cerrándose. El Racing no deja de ser un equipo atractivo para acoger jugadores que salgan cedidos al no encontrar un hueco en sus equipos, sobre todo en la Segunda División. En el caso del Oviedo, con 28 futbolistas en el primer equipo, o el Sporting de Gijón con treinta –sin contar con los chavales de la cantera— es obvio que tendrán que dar salida a efectivos al no poder hacerles ficha a todos. En ese sentido, el Racing espera con ansia el próximo 13 de septiembre, fecha en la que dará comienzo el campeonato en la categoría de plata y con él se disiparán muchas de las dudas que ahora mismo frenan parte de las propuestas verdiblancas. Los responsables verdiblancos, tanto Pedro Menéndez como José María Amorrortu, han obtenido la misma respuesta durante el mes de agosto, el primero tras su nombramiento. El mercado de Segunda quedará clarificado en apenas diez días, para el de Segunda B aún queda tiempo puesto que queda más de un mes para que dé comienzo la Liga.

El Racing en esta ocasión estará más limitado que hace dos temporadas, cuando arrancó el primer proyecto con el Grupo Pitma a la cabeza. En aquella ocasión, Chuti Molina fue la persona elegida para gozar de plenos poderes a la hora de configurar la plantilla y dispuso de un presupuesto elevado para la categoría. Manejó como creyó oportuno el capítulo de llegadas como también rescindió los contratos heredados de algunos futbolistas –Antonio Tomás, Juanjo, Alex García– o, incluso, acabó con la relación de técnicos de la casa, caso de Javier Pinillos o Adolfo Mayordomo. Esta temporada, la situación no es similar. El presupuesto es prácticamente la mitad que el de la temporada del ascenso y además un porcentaje muy alto estará destinado al pago de los contratos de los futbolistas que continúan de la pasada campaña. Bien es cierto que podrán contar con una partida que el club recibirá en concepto de ayuda al descendido, por parte de la Federación.

Y en esas está el club. Asesorado por José María Amorrortu, Pedro Menéndez, acostumbrado a armar equipos con apenas recursos –lo hizo en varias ocasiones y con buenos resultados en Villaviciosa, con el Lealtad– continúa a la espera después de haber echado el lazo a jugadores en todas las líneas. En las oficinas de El Sardinero no sólo trabajan en los mercados nacionales, sino que sondean con esmero el marco sudamericano –Argentina, Uruguay, Paraguay...– donde el valor de la moneda descendió con la pandemia y confían en poder encontrar, aprovechando el buen cartel que tiene el Racing, con futbolistas de garantías llegado el caso.

El club conoce las prisas que siempre tiene el aficionado cuando llegan estas fechas, pero en este periodo en que el mercado está parado hasta que comience la Segunda División y con ello se desbloqueen buena parte de los contratos, pretende aprovecharlo para comprobar el rendimiento de los chavales de la cantera con dos objetivos;el primero, satisfacer una de las premisas del nuevo proyecto dándole protagonismo a la cantera y otro, poder con ellos cumplir con la reglamentación que obliga a tener un número determinado de fichas sub 23.