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FERNANDO J. PÉREZ
Campo Base Manaslu
Miércoles, 13 de enero 2021, 20:58
El 12 de enero de 1984 los polacos Maciek Berbeka y Ryszar Gajewski se convertían en las primeras personas en hollar en Manaslu en invierno. 37 años después, Simone Moro y Alex Txikon arribaron ayer al campo base. El destino dirá si ha ... sido una mera casualidad o hay algo más. De momento, lo que dicen las fotos de aquella expedición polaca y lo que muestra ahora el Manaslu es que la montaña tiene tan poca nieve como entonces. Crucemos los dedos para que siga así.
El acceso al campo base del Manaslu tiene una singularidad. Hay que salvar nada menos que 1.300 metros de desnivel desde el punto anterior, Samagaon. En ningún otro ochomil se salva tanto desnivel. Llegar requiere un esfuerzo fuera de los común y se suele pagar con un par de días de dolor de cabeza.
Durante los últimos días, Alex Txikon y Simone Moro han asistido entre incrédulos y asombrados al caótico intento de escalar por primera vez en invierno la segunda montaña más alta; y el equipo liderado por Nirmal Purja ha perdido todo el material que habían dejado en el campo 2.
La expedición de Alex Txikon decidió dividirse y realizar la ascensión en dos días. Ayer lo hicieron el propio Alex y Simone Moro, junto al cocinero Eneko Garamendi y quien escribe, y este miércoles lo ha hecho el resto del grupo. Para cuando hoy a primera hora de la tarde han arribado los últimos, el campamento estaba ya prácticamente montado. El alpinista vizcaíno no se tomó un minuto de descanso y en cuanto llegó comenzó a ordenar petates, paquetes de comida y todo lo que tuvo por delante.
Quiere tenerlo todo preparado cuanto antes para empezar a mirar a la montaña. Si mantienen los planes y aguanta la meteo, en un par de días harían la primera incursión. Hoy les han tomado la delantera los sherpas Chhapal y Kalden, que han subido hacia el campo 1 a realizar un primer depósito de material, pero la nieve acumulada se lo ha impedido y lo han dejado a medio camino. En la próxima incursión utilizarán raquetas o incluso esquíes.
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El campo base está situado a 4.900 metros, en un lugar privilegiado, a salvo de las avalanchas y con vistas tanto al valle de Samagaon como al Manaslu. Es un campo grande: una cocina, un almacén, tres domos medianos, uno grande y una docena de tiendas individuales, además del retrete.
La meteorología es fundamental para hacer del campamento un lugar amable. Durante el día, el sol da desde las 7 de la mañana hasta las 3 de la tarde, con una temperatura exterior que ronda los 10 grados y llega a los 20 dentro de los domos. Pero en cuanto el sol se oculta tras el Manaslu todo cambia. En apenas media hora, la temperatura se desploma bajo cero y todas las capas de ropa son pocas. Esta pasada noche, la temperatura ha sido de quince bajo cero, diez bajo cero dentro de las tiendas.
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