Capturan a la osa que mató a un deportista en un bosque del noreste de Italia

Tras varios días siguiéndole el rastro, en los que se instalaron diversas trampas en la zona, fue posible sedar y capturar a Jj4 a las 23 horas de la pasada noche gracias a que se introdujo en una de los tubos-jaula donde se había dejado comida para atraerla. La osa se encuentra ahora recluida en el centro para fauna alpina de Casteller, en Trento, junto a otro plantígrado, M49, considerado igualmente peligroso y célebre por conseguir escaparse dos veces de este recinto. De 17 años de edad, Jj4 estaba acompañada cuando fue capturada por tres cachorros de dos años de vida que han sido dejados en libertad al estar ya en la fase en que abandonan a la madre. «Pesan entre 35 y 45 kilogramos y son perfectamente autosuficientes y autónomos. De hecho, estaba a punto de comenzar el período del celo de la madre», explicó Raffaele De Col, dirigente del departamento de la Protección Civil y la Guardia Forestal en Trento. «Estábamos en el momento ideal para la captura».

El presidente provincial, Maurizio Fugatti, celebró la captura «en tiempos breves» de Jj4, en una zona además donde están presentes otros veinte ejemplares de su especie. «Es una noticia que habríamos querido dar en 2020, cuando solicitamos su captura por primera vez. Hoy hay amargura y tristeza por lo sucedido en este tiempo», señaló Fugatti, refiriéndose al fallecimiento de Papi, de 26 años de edad, debido a los zarpazos y mordiscos que sufrió el 5 de abril por parte de Jj4.

Este ataque, precedido por otros episodios similares en los años anteriores aunque no mortales, ha provocado una polémica en Italia por la creciente actividad de osos considerados agresivos para el hombre. Estos animales fueron reintroducidos a principios de siglo en la provincia de Trento en el marco del proyecto 'Life Ursus', que pretendía que reconquistaran todo el arco alpino italiano. Los animales, no obstante, han optado por quedarse y multiplicarse en esta área, donde superan ya el centenar, el doble de la cantidad inicialmente prevista por los biólogos.

«Ahora para nosotros el problema ya no es Jj4, sino la convivencia entre el hombre y el animal. A quien le importe el proyecto debe ayudarnos a trasladar a los ejemplares a otras zonas para evitar la sobrepoblación», indicó Fugatti. Se espera que en los próximos días afronte esta cuestión el Gobierno central de Giorgia Meloni. Las autoridades locales tratarán ahora de capturar a otros dos osos considerados igualmente peligrosos para el ser humano, al tiempo que han reforzado la seguridad en el centro de fauna de Casteller ante la posibilidad de que se produzcan manifestaciones de grupos animalistas.