Música en Grande se traslada a 2021 y Torrelavega trabaja en una alternativa para este verano

En Santander sigue la incertidumbre sobre la celebración de los festivales en la Campa de La Magdalena

Rosa Ruiz

Santander

Viernes, 22 de mayo 2020, 07:19 | Actualizado 07:39h.

En Torrelavega ya es oficial. Ni en julio, ni en septiembre. El festival 'Música en Grande' se traslada a julio de 2021. «Con el mismo cartel y algún que otro nombre nuevo», tal y como explicó ayer a este periódico Guillermo Vega, de Mouro Producciones, ... empresa concesionaria de los conciertos. Han sido varias semanas de conversaciones, llamadas, reuniones, unos meses en los que se anunció un primer aplazamiento a la primera quincena de septiembre. Pero finalmente, la crisis del coronavirus ha hecho que los conciertos se aplacen al próximo año, tal y como ha ocurrido con grandes festivales del país como el BBK Live de Bilbao, el Riverland en Asturias o Vive Latino en Zaragoza, entre otros. Eso sí, Mouro Producciones y el Ayuntamiento de Torrelavega ya trabajan, y tienen prácticamente cerrada, una alternativa musical para la ciudad este mismo verano. Será en un formato más reducido para seguir con todas las medidas de seguridad indicadas desde el Ministerio de Sanidad y permitir al público disfrutar con actuaciones en vivo de calidad.

De los que aún no hay noticia es de los festivales que se celebra en La Magdalena durante el verano de Santander. En este caso la empresa concesionaria es MG Producciones, si bien Mouro colabora con la organización. «Por mi experiencia en el sector y por lo que veo que ocurre con el resto de festivales apostaría porque tampoco se van a celebrar», asegura Guillermo Vega, quien insiste en que esa tónica «se repetirá con los festivales de toda España durante 2020».

'Música en Grande' esperaba este verano a Leiva, Amaral, Andrés Calamaro, Rulo y La Contrabanda, Sidonie, Dorian, La Habitación Roja y Andrés Suárez. A ellos se añadieron José Mercé, Huecco, María José Llergo y Demarco Flamenco. Estos eran los principales nombres del cartel que, insiste Guillermo Vega, estarán en el Malecón en la próxima edición «con otros más que se anunciarán en su momento».

Sobre la alternativa que maneja señala que será «muy especial» y «una celebración de la vida» con nombres también de primer nivel. ¿Y cuándo será? «En el transcurso del verano».

En cuanto a los conciertos de Santander, Vega lamenta que a estas alturas las autoridades aún no hayan dado el paso de suspender. En su opinión, debe ser el Gobierno nacional el que haga un decreto sobre la celebración o no de los festivales pues considera que «el Ayuntamiento de Santander, que en este caso es el organizador, parece estar a la espera para tomar o no la decisión de seguir adelante con la programación».

«La alcaldesa ya ha anunciado que habrá fiestas en Santander y estoy seguro de que las habrá e incluso habrá actuaciones. Lo que veo inviable es que vayan acompañadas de un gran festival como el de la 'Campa' porque con las medidas de seguridad que hay que adoptar los números no salen», explica este veterano promotor quien recuerda que para que un concierto sea rentable en un espacio como La Magdalena hay que vender aproximadamente 8.000 entradas y que «si hay que acotar el aforo hasta 800, ¿quién paga la diferencia a la empresa promotora?».

Vega, que insiste en que la empresa concesionaria es MG Producciones, recuerda que la suya, además de colaborar con los festivales de la Campa, también lo hace en otros de los que se celebran en la capital cántabra como Hoky Poppi, Magdalena en Vivo, Reaggeton Beach, o November Live o Magdalena Winter. «A lo mejor este último, que se celebra en Navidad, puede llegar a hacerse, pero el resto lo veo imposible por las condiciones actuales de la pandemia», lamenta.

Recalca, eso sí, en el daño que esta incertidumbre hace a las empresas concesionarias. «En el caso de otros festivales que ya se han aplazado se han puesto en marcha distintas medidas para que las empresas no pierdan tanto. En Sitges, por ejemplo, el Ayuntamiento ya se ha comprometido a que los adjudicatarios se encarguen de las dos próximas ediciones. Es muy importante ayudar a que estas empresas puedan seguir trabajando por medio de algún tipo de ayudas como, por ejemplo, las que se han ofrecido a los hosteleros».

En definitiva, concluye, «queremos que el Estado central decrete que no se pueden celebrar estos festivales para que las empresas podamos buscar soluciones como la solicitud de ERTE y que los ayuntamientos negocien soluciones con los concesionarios».