Cementos Alfa apaga el horno eléctrico de Mataporquera pero mantiene los molinos de cemento

Como ha contado hoy este periódico, la corporación estaba estudiando desde la cúpula nacional un calendario de paros de aquellas instalaciones más intensivas en consumo eléctrico, minimizando existencias en las fábricas y sin afectar al suministro de cemento final. La planta cántabra, con muchos embarques este mes, esperaba no tener que detenerse prácticamente nada, pero por el momento ha apagado su horno al menos hasta el fin de semana.

Las factorías interrumpen el funcionamiento de los hornos de producción de clínker, pero no así los molinos de cemento con el fin de atender la demanda de los clientes, aunque estos últimos también tienen un alto consumo de energía. En los hornos se calcina la materia prima para producir el clínker y en los molinos de cemento se muele dicho producto con otros elementos. Las fábricas tienen stock suficiente para que sus molinos de cemento sigan funcionando una temporada.

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La compañía define como «inasumible» el precio actual de la electricidad. A día de hoy, energía y combustibles representan casi el 70% de los costes de producción, cuando normalmente suponían el 35%. La cuestión pasa por conocer durante cuánto tiempo se mantendrá esta política.

La propia directora de planta de Cementos Alfa en Mataporquera, Beatriz Malagón, ya avanzaba en enero a El Diario las preocupaciones que la energía ocasionaba en la organización. «El escenario que se presenta para la industria intensiva en consumo de energía térmica y eléctrica, como es el caso del sector cementero, no es muy halagüeño. Precisamente, factores clave como el precio de la energía eléctrica o los combustibles, que ya impactaron en el resultado de la organización el año pasado, siguen estando presentes sin perspectivas de reducción», anotó. En aquel entonces ni se intuían las tarifas actuales, disparadas por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.