Forgings & Castings logra el 'ok' técnico de la SEPI y espera un rescate en breve

Una vez que la 'due diligence' está superada y con informe favorable, es cuestión burocrática más que otra cosa. Marimón Abogados y Grant Thornton fueron los encargados de evaluar la petición cántabra.

En todo caso, se espera que el anuncio se produzca en las próximas semanas, antes de final de año. De hecho, el de Forgings & Castings, junto al de la cotizada Airtificial, serán los dos próximos rescates que saque adelante la SEPI.

Según las mismas fuentes, personal de la factoría campurriana, propiedad en la actualidad de la corporación germano-estadounidense NFL encabezada por Bruce Liimatainen, ya se habría reunido con responsables de la Sociedad Estatal para compartir la última información y conseguir todos los parabienes de la Administración central.

La compañía sustentó su decisión en las dificultades con las que se estaba topando para acceder a financiación bancaria ordinaria tras los efectos de la pandemia, por lo que entendía que las condiciones de liquidez que ofrece el instrumento de la SEPI son mejores que las que presenta actualmente el mercado.

El montante pedido en un primer momento se situaba en el entorno de los 30 millones, aunque es posible que durante la negociación con la SEPI se haya ajustado la cantidad. En ningún caso se rebasará esa cifra.

«La fábrica de Reinosa se encuentra en vías de consolidar su proyecto de modernización industrial para poder convertirse en una de las empresas de acería y forja más avanzadas y competitivas en el contexto global», explicaron en marzo desde Forgings & Castings, para agregar que «si bien la planta ha sido capaz de mantener a toda la plantilla activa durante el ejercicio pasado sin necesidad de recurrir a medidas de regulación, 2020 ha sido un año de dificultades y no ha sido posible cumplir con todos los objetivos de la hoja de ruta creada antes de la pandemia. De cara a 2021, la incertidumbre generada por el covid-19 en los mercados está endureciendo las vías de financiación habituales para la industria, de manera que el plan de desarrollo de la planta se ha visto ralentizado por los efectos de la pandemia». En la factoría de forja y grandes piezas de Campoo trabajaban 520 empleados de forma directa en el momento de la petición ante la SEPI.

La siderurgia de Reinosa se encuentra igualmente afectada por la tormenta energética, hasta el punto de que ha tenido que acompasar su producción a los momentos en que la electricidad da una tregua en la factura.

Aun así, se está en permanente contacto con los clientes para poder dar respuesta a los pedidos, porque renunciar a encargos no es una opción. En un mercado peculiar como en el que se mueve Reinosa Forgings & Castings, actualmente hay «poca visibilidad» en cuanto a tendencias y contratos para los próximos meses, según admiten expertos del sector. Se está a la espera de la capacidad de absorción de precios por parte de los clientes y qué márgenes pueda manejar la fábrica cántabra.

Forgings & Castings no es la única firma regional pendiente de la SEPI. El Grupo Celsa, con factorías como Global Steel Wire, está a la espera de que el organismo apruebe su rescate, por una cifra inicial de 700 millones.