José Luis Feito: «Es difícil que en estas elecciones gobiernen los buenos»

En su conferencia 'Situación y perspectivas de la economía española' ha definido la economía española con una sola palabra: «desaceleración». ¿A qué se debe? ¿cuáles son los factores? Hay dos juegos de causas, según el economista. Por un lado, los «factores internacionales que están impulsando la desaceleración», y ha puesto como ejemplo la «guerra comercial, que es un desastre, impulsada por el presidente de Estados Unidos y seguida del resto de presidentes de otros gobiernos». Para Feito otro de los factores es claramente el Brexit, que ha definido como «otra desgracia sin paliativos, de gente que hace referéndums sin saber lo que hace».

Pero también hay factores nacionales, sería injusto culpar de los males propios exclusivamente a ajenos. Primero, «el agotamiento de los impulsos expansivos de las reformas que se hicieron para luchar contra la crisis. Esas reformas se dejaron de hacer hacia el año 2014-2015. Desde entonces, que vivimos un periodo electoral continuo ha habido amenazas contrareformas», asegura Feito. España está «cayendo en errores del pasado» y ha rechazado los denominados «viernes sociales», que a su juicio serán «los viernes de dolores» del futuro.

En resumen, la economía española está viviendo una «desaceleración de cierta intensidad, pero relativamente suave y dulce. Si no se frena terminará mal».

Para cualquier economista las predicciones de futuro son simples matemáticas. Feito está convencido -y sin querer parecer «alarmista»- de que habrá una «destrucción de prosperidad en 12-18 meses». Y una cosa llevará a la otra, a la «pérdida brutal de la competitividad de la economía». ¿Cómo se mide? Con una variable sencilla, un diferencial basado en los costes laborales unitarios: «El crecimiento de los salarios, más costes de seguridad social, menos el crecimiento de la productividad».

Otra pieza fundamental, el gasto del déficit público. Según Feito, España sigue teniendo la «mayor tasa de paro de toda la comunidad europea, es el país que tiene la tercera deuda exterior neta más elevada, de forma que la carga de intereses en el gasto público es de las más elevadas de Europa».

Por tanto, ¿qué nos queda? ¿qué debemos hacer? «Frenar la caída de empleo y pasar a ser uno de los países privilegiados por los mercados financieros. La gravedad de la desaceleración va a depender de que los factores sigan funcionando y de otro mecanismo». ¿Cuál? «Los tipos de interés». El expresidente del Instituto de Estudios Económicos cree que España debe gran parte de su recuperación al Banco Central Europeo. Al ser muy bajos benefician a España por su alto nivel de endeudamiento, provocando que sea «prácticamente imposible» que se repita una recesión, aunque «en algún momento subirán». «Eso puede pasar en cualquier momento a partir de enero de 2020. Cuando ocurra no deberían ser movimientos bruscos, pero por los niveles de endeudamiento de la economía española un pequeño movimiento combinado con esos factores mencionados sería el golpe decisivo para alterar radicalmente la visión que tenemos de nosotros mismos, de que vamos a seguir creciendo y corrigiendo desequilibros». En ese momento, dice Feito, «cambia el juego».

Con este panorama, ¿se puede evitar? ¿es algo inexorable? Haciendo una metáfora con la novela 'Un cuento de Navidad' de Charles Dickens, José Luis Feito, compara la salud de la economía española con la del niño Tim, ese personaje que se mueve con muletas por una de las casas que visita Scrooge.

Todo dependerá de las «elecciones». Según el economista, ya sabemos lo que va a ocurrir. «Habrá una coalición», asegura. ¿De quién? Hay tres opciones, según Feito: «De los buenos, que son capaces de invertir las tendencias, los menos buenos, aquellos que no van a empeorar la situación y los malos, los que lo van a empeorar». Y a parte de esto, el expresidente del Instituto de Estudios Económicos, cree que en 2021 «habrá de nuevo elecciones» porque la falta de mayorías estables hace «difícil» que un Ejecutivo acometa «reformas que impiden una crisis», lo que cree que desembocaría de nuevo a una cita electoral.

-¿Y en las inminentes? ¿Saldrán los buenos, los malos...?

«Es difícil que salga Gobierno de los buenos. Imposible. Aspiro a que no haya de los malos».

Y con esos pensamientos «desordenados», según sus propias palabras, ha dado paso al turno de preguntas de los asistentes al Foro Económico de El Diario Montañés, celebrado en el Hotel Bahía de Santander.