Lupa prevé invertir más de 30 millones para construir un gran centro logístico en Orejo

El grupo de distribución alimentaria Semark -que engloba a los supermercados Lupa- tiene previsto invertir más de 30 millones de euros en la construcción de un nuevo centro logístico en la localidad de Orejo que dé soporte a su actividad en Cantabria y Castilla y León. Para ello, la corporación ha adquirido una parcela de 83.000 metros cuadrados en el Polígono Industrial Marina-Medio Cudeyo.

Los contratos de compraventa entre la organización y la empresa pública Sicán se rubricaron el jueves, poniendo fin así a unas conversaciones que arrancaron hace seis años aproximadamente y que se aceleraron notablemente en los últimos dos ejercicios, con la fase final completada en este inicio de 2018. Como explican fuentes de Semark, una vez con el suelo bajo su propiedad, la hoja de ruta para los próximos meses se centra en la redacción del proyecto y la posterior tramitación de las pertinentes licencias. Estos pasos se prolongarán cerca de medio año, según las estimaciones que manejan fuentes conocedoras del proyecto. Posteriormente arrancaría la construcción propiamente dicha, que en un complejo como el previsto se llevaría a cabo durante al menos otros 12 meses.

En Lupa aún no tienen definidos todos los detalles e impacto de la actuación, que ha salido a la luz pública antes de lo esperado después de que el pasado viernes el presidente autonómico, Miguel Ángel Revilla, avanzara en Onda Cero el plan. Con todo, los datos aportados por el jefe del Ejecutivo no coinciden en su mayoría con la realidad de la inversión.

Así las cosas, Semark contempla llevar a cabo la propuesta en diferentes fases. La primera, en la que se empieza a trabajar desde ya, gira en torno a levantar una primera nave de 30.000 metros cuadrados con una zona de temperatura ambiente y otra para productos frescos y refrigerados. «Esto nos va a permitir una ampliación de surtido, tanto para el producto seco como para el refrigerado y el producto local», apuntan desde la compañía, que igualmente hace hincapié en los avances tecnológicos de los que gozará el futuro centro.

No solo eso, sino que también se ha valorado el emplazamiento a la hora de adoptar la decisión de enclavar el recinto logístico en Orejo, junto a la fábrica de la firma Fermacell, antigua GFB. «Con estas nuevas instalaciones vamos a ser más eficientes en los procesos logísticos de manipulado y transporte, lo que facilitará reducir el tiempo de suministro a los distintos supermercados Lupa, además de permitirnos seguir creciendo mediante la apertura de nuevos supermercados, lo que conllevará un aumento considerable de puestos de trabajo tanto para los recintos logísticos como para los puntos de venta», detalla la organización, que alcanzó en 2017 una cifra de negocio de 500 millones y emplea a 3.331 personas.

El consejero de Industria, Francisco Martín, no ocultó ayer su satisfacción por el hecho de que Lupa haya decidido seguir apostando por la Comunidad. «Para Cantabria es una noticia magnífica por lo que supone en términos de consolidación de empleo. Además, estamos generando la confianza suficiente para que las empresas vean a la región como el lugar idóneo para la instalación de centros logísticos», dijo.

Aún resta por definir cuántos empleados se darán cita en el nuevo complejo, aunque además de afianzar los puestos de trabajo ya existentes las partes implicadas confirman que el proyecto llevará implícitas nuevas contrataciones.

Martín quiso resaltar igualmente el impacto que tendrá en términos de empleo inducido. «El sector del transporte debe estar de enhorabuena, tanto en los traslados de media distancia como en los de última milla», sostuvo, sin querer dejar pasar la oportunidad de «agradecer» a José Antonio Vega Berisa, presidente de Semark, «su confianza en Cantabria».