Los nuevos dueños de Celsa capitalizan 1.300 millones de deuda por el 100% de la empresa

El último paso procede del Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), que el lunes incluía la capitalización de 1.300 millones de deuda así como la reorganización societaria. Este último cambio pasa por la unificación de las sociedades que la familia Rubiralta empleaba para controlar el Grupo, mientras que los acreedores han concentrado todo el capital en la firma Inversiones Pico Espadas.

El Borme asimismo refleja el nombramiento del exconsejero delegado de Gas Natural Rafael Villaseca como consejero de esa sociedad que controlará Barna Steel, que a su vez tutela todas las empresas del grupo. Villaseca es un viejo conocido del tejido fabril que Celsa posee en Cantabria, puesto que también fue consejero delegado de la antigua Nueva Montaña Quijano, absorbida por los Rubiralta en la década de los 80.

Con la 'operación acordeón' que dibuja el Borme los anteriores responsables pierden las acciones sobre la empresa familiar fundada en los años 60.

A partir de ahora todavía restan diversos pasos relevantes que acometer, entre ellos la búsqueda y alianza con un socio industrial nacional que pueda quedarse con el 20% del capital social. Entre las favoritas para tal función aparece Sidenor, con gran presencia en Cantabria en los últimos años.

La siderurgia vasca ha estado de actualidad recientemente al anunciar al Gobierno regional que estudia una importante inversión para su planta de laminado de acero en Reinosa.