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Era una reunión esperada, pero no ha arrojado novedades sobre el futuro e intenciones de Sidenor en Reinosa. La compañía acaba de remitir un comunicado en el que señala que «Sidenor se ha reunido hoy con el comité de empresa de Reinosa para informarle sobre ... la nueva organización de mantenimiento de la fábrica. Dicha información ha sido trasladada al comité de empresa en una reunión, en la que como se había anunciado, la organización del mantenimiento era el único punto del orden del día».
La siderurgia vasca no ha entrado por tanto en temas de mayor calado como las supuestas inversiones y garantías industriales para la factoría que en teoría ha anunciado al Gobierno de Cantabria, y de las que nada se sabe hasta la fecha.
Concretamente, Sidenor ha comunicado al comité de empresa «que dicha nueva organización busca ajustarse a las necesidades reales de mantenimiento de la fábrica, optimizando las instalaciones. Al mismo tiempo se ha informado que se trabaja en la estandarización de ciertas actividades de mantenimiento con el objetivo de mejorar su eficiencia».
La organización señala que «se trata, como ya se ha hecho en otras ocasiones, y como es habitual en todas las empresas industriales, de adaptar la organización a la situación del mercado».
Por otra parte, el vicepresidente autonómico, Pablo Zuloaga, pidió a la dirección que el tren de laminar se ponga en marcha «ya» para garantizar un futuro y que los trabajadores «dejen de desconfiar» sobre la posibilidad de deslocalizar la planta de Reinosa.
Por su lado, la presidenta del Partido Popular en Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, insistió a Sidenor en que lo primero que tiene que hacer es aportar «garantías» sobre su apuesta a futuro con la factoría.
A preguntas de los medios de comunicación, la política dijo entender la situación de «desasosiego», «desconfianza» e «incertidumbre» que se vive en la empresa dado que se sigue sin recibir «ninguna noticia concreta ni ninguna garantía» en relación con la actividad en el tren de laminado, cuyo «compromiso» era ponerlo en marcha en el mes de abril.
Además, añadió que «yo todas las declaraciones, todas las buenas intenciones, todos los anuncios que se hacen en época electoral tiendo a darles muy poca credibilidad», dijo, para quien «lo que tiene que hacer la empresa es sentarse con la representación de los trabajadores, si es necesario también con el Gobierno, y poner garantías y certidumbres encima de la mesa», trasladó, en referencia al mensaje tranquilizador lanzado el martes por el consejero de Industria, Javier López Marcano.
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