Revilla admite la «complicada» coyuntura de la industria cántabra

Además, el presidente Miguel Ángel Revilla, ha admitido que Cantabria vive una coyuntura «complicada», que ha achacado al «bajón» en el consumo de automóviles y a los aranceles al acero, y ha asegurado que trasladará esta situación al presidente en funciones, Pedro Sánchez. Y junto a ello, la consejera de Empleo, Ana Belén Álvarez, ha informado en el Consejo de Gobierno de la constitución de las comisiones sectoriales de la Mesa del Diálogo Social, entre las que está la de transformación del modelo productivo, modernización de la industria y medio ambiente.

En el análisis de la situación que ha hecho el presidente regional, éste ha opinado que el «bajón» en el consumo de automóviles está repercutiendo en el sector industrial de Cantabria «de manera muy decisiva», al igual que la guerra de aranceles al acero entre EEUU y China. «O sea que vamos a tener una temporada, mientras no se disipen esas dos dudas, que van a afectar muy seriamente al sector industrial», ha augurado Revilla.

De momento, el presidente cántabro ha argumentado que solo se pueden tomar medidas «parciales», como ha recordado que ha hecho el Gobierno regional con su Plan Renove de ayudas a la compra de vehículos, porque las «globales», según ha incidido, «van a depender de la coyuntura». «Vamos a intentar hacer lo que se pueda dentro de la limitación que hay, porque luchar contra la tendencia y un problema global es muy complicado desde una comunidad autónoma», ha abundado Revilla.

Por su parte el consejero de Industria, Francisco Martín, que ha manifestado su inquietud por los expedientes temporales de regulación de empleo que han sufrido importantes empresas cántabras de fabricación de componentes, ha iniciado la ronda recibiendo en su despacho del Pctcan a los responsables del clúster GIRA (Grupo de Iniciativas Regionales de Automoción), a quienes ha ofrecido todo su apoyo y máxima colaboración para salvar la actual coyuntura y atenuar en lo posible sus consecuencias, sobre todo en aspectos como el mantenimiento del empleo y la competitividad.

En las próximas semanas, Martín se reunirá con la comisión de Industria de la Cámara de Comercio de Cantabria, con la de la Cámara de Comercio de Torrelavega y con la AEGE (Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía). También tiene previsto reunirse en Bruselas con miembros de la Representación Permanente de España ante la UE para abordar los fondos para la descarbonización y las ayudas para los electrointensivos.

Además, ha anunciado, se constituirá la comisión sectorial sobre transformación del modelo productivo y modernización de la industria, liderada por la Consejería, y compuesta por organizaciones sindicales, empresariales y gubernamentales.

Su objetivo es «llevar a cabo una transición por medio de la descarbonización, la sostenibilidad medioambiental, el impulso digital de las empresas y el apoyo al desarrollo de sectores estratégicos», ha destacado el Ejecutivo en una nota de prensa.

La presidenta del PP de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha exigido al Gobierno de Cantabria un «cambio total de rumbo» en su política industrial, que actualmente considera «inexistente, sustentada en la propaganda, la improvisación y la incompetencia».

Buruaga, en conferencia de prensa, ha expresado su preocupación por la situación de la industria en la región y ha lamentado que la evolución del paro en el sector vivió el peor noviembre desde 2013, con 2.400 ocupados menos que hace diez años, informa EFE.

Para la líderes de los populares, de la misma manera que las ventas industriales contribuyeron al crecimiento del PIB de Cantabria en años anteriores, el «frenazo industrial» es, en parte, el responsable de su «brusca» caída en la actualidad.

«Todo baja en la Cantabria de Revilla y Zuloaga, salvo el paro, la desigualdad y la pobreza», ha añadido Buruaga, que considera que Cantabria va a cerrar el año con un «diciembre negro» para la industria regional por la «grave incertidumbre» y la «indefinición» de la política industrial y energética de Pedro Sánchez.

Pero, según Buruaga, también por la falta de estrategia industrial y la total ausencia de compromiso del Gobierno de Cantabria, y muy especialmente, del PRC.

Al respecto, se ha referido a la situación de «dos de las mayores» empresas de Cantabria, Global Steel Wire en Santander y SEG Automotive en Treto, que, en su opinión, han presentado un ERTE «perseguidas por los bandazos y maximalismos de Pedro Sánchez, que se ha especializado en maltratar a sectores enteros como el de la automoción».

También ha afirmado la «inseguridad» y los «ataques» del Gobierno en funciones «tienen en vilo» a otras dos grandes empresas de Cantabria, Solvay y Ferroatlántica

Podemos ha calificado de «límite» la situación de «crisis» que, en opinión de esta formación política, vive la industria cántabra, de lo que considera «culpable» al Gobierno regional encabezado por Miguel Ángel Revilla, por lo que ha exigido la destitución del consejero del ramo, Francisco Martín, «por no saber afrontar la situación».

En un comunicado, Podemos considera que la consejería dirigida por Francisco Martín «ha fracasado» y advierte de que Cantabria «no puede permitirse continuar ni un minuto más sin un plan de recuperación industrial a medio plazo que siente las bases del crecimiento cántabro».

«Cantabria necesita ese plan económico de choque que impida que, por ejemplo, empresas como GSW con 1.100 empleos directos, 4.000 indirectos y más del 6% de toda la producción cántabra o que referentes industriales autonómicos como SEG Automotive, con cerca de 900 trabajadores, se hayan visto abocados a anunciar un ERTE», reclama Podemos.

A su juicio, «la situación de la industria cántabra se explica por la inacción de los gobiernos del bipartito PRC-PSOE a lo largo de los años y a su total desprecio por el sector, que se demuestra con datos como que Cantabria es la segunda provincia que menos invierte en I+D+I o el recorte de 1,4 millones a los incentivos de la industria del Besaya en el último presupuesto que ha presentado ejecutivo».

Izquierda Unida de Cantabria ha instado al presidente del Gobierno autonómico, Miguel Ángel Revilla, a convocar una reunión extraordinaria y urgente de la Mesa del Diálogo Social para abordar medidas «inaplazables» con las que combatir la «sangría» industrial que se está intensificando en la comunidad autónoma.

Así se ha pronunciado la coordinadora de la formación de izquierdas, Leticia Martínez, en relación a los sucesivos Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que se vienen anunciando en fábricas como GSW, SEG Automotive o Ferroatlántica, entre otras.

Martínez ha apelado a la necesidad de «salvaguardar» al sector industrial, «lo poco de estable que había en el mercado de trabajo cántabro», y ha hecho hincapié en el «efecto tractor» que estas medidas tienen sobre industrias auxiliares y sobre otros sectores como el comercio o los servicios.

IU quiere saber si el Gobierno tiene algún plan para los trabajadores afectados por ERTE y si está barajando alguna medida para penalizar la precariedad o formar en nuevos sectores económicos a los trabajadores cántabros.

Para Vox, «el segundo semestre de 2019 ha sido una época muy negativa para la economía de Cantabria. La incapacidad del Gobierno Regional para leer los datos de una forma adecuada nos traslada a un escenario de absoluta incertidumbre económica».

«El ERTE anunciado por Ferroatlántica de Boo, unido al anunciado por Global Steel Wire para su planta de Santander y la insolvencia de Emerita Resources, que reduce a cenizas el proyecto de explotación del zinc hace tambalearse al tejido industrial de Cantabria mientras el Gobierno de Cantabria mira hacia otro lado».

En palabras de Cristóbal Palacio, portavoz de Vox en el Parlamento de Cantabria, las dos grandes acciones del Gobierno Regional han sido, por un lado, «el anuncio del vicepresidente de Cantabria, Zuloaga, de una medida pequeña pero que se puede asumir como es la ampliación del Plan Renove; y por otro lado, el envío de una carta de la Consejera de Economía al Gobierno de España para ponerse a la cola y solicitar que se instale una fábrica de baterías en Cantabria, aunque parece que se la llevará algún nacionalismo periférico». Para Palacio, «mientras el PNV negoció abaratar el coste energético para las empresas vascas, el PRC sigue repartiendo anchoas».

Para el representante de Vox, la «desidia industrial» del Gobierno de Cantabria «evidencia que tenemos un presidente que le importa más el adoctrinamiento de la Memoria Histórica y leyes LGTBI que el empleo que las cosas de comer, como es el empleo de nuestra Comunidad».

VOX ha presentado una Proposición No de Ley, que será debatida en el pleno del próximo día, 16 de diciembre, para que el Gobierno Regional dé cuentas al Parlamento Cántabro del avance, si es que se ha producido alguno, en la Estrategia para el desarrollo y crecimiento industrial de Cantabria hasta el 2030 y una Moción, consecuencia de una interpelación, sobre la venta de Sidenor Forgings&Casting, S.A.