Emilio Duró: «No vale rendirse, hay que intentar sacar lo mejor de uno mismo»

Licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Autónoma de Barcelona y por la Escuela Superior de Administración y Dirección de Empresas (Esade), es master en Administración de Empresas por Esade. Exdirectivo de empresas nacionales e internacionales, colabora como invitado externo en distintas Universidades y Escuelas de Negocio de ámbito nacional e internacional. En la actualidad, y desde hace más de 30 años, trabaja como asesor, consultor y formador en las primeras empresas del país. Ha expuesto sus teorías en los principales medios de comunicación, es autor de múltiples artículos en publicaciones empresariales y de difusión general.

Durante la conferencia Duró reflexionará sobre las habilidades y cualidades que serán necesarias en este futuro cambiante, tanto a nivel personal como de empresarial, para afrontar positivamente los retos que se nos presentan, intentando encontrar «un porqué» vivir que de significado a nuestra vida y no solo «cómo» vivir. No vivimos una época de cambio, estamos ante un cambio de época que hace casi imposible prever el futuro. Los conocimientos se duplican cada año, la incertidumbre es parte de nuestras vidas, la presión es constante, las previsiones se vuelven obsoletas al poco tiempo de hacerlas… Este cambio es tan profundo que afecta a nuestra forma de vivir y de trabajar. Es un tiempo de grandes amenazas que ponen en peligro nuestra supervivencia como especie.

–¿Cuál es el objetivo de su ponencia?

–Reflexionar, junto con los asistentes, sobre los retos que nos depara el futuro y cómo afrontarlos con una visión positiva, enfocando el presente y no el pasado que no se puede cambiar, con una vida equilibrada a nivel físico, emocional, racional y espiritual, con optimismo, con pasión, con resiliencia… En definitiva, intentar sacar lo mejor de cada uno para no rendirnos ante los golpes que nos da la vida. Y como estamos en la época de 'Big data', la inteligencia artificial nos está permitiendo saber qué tienen en común las personas 'felices' (rinden el doble que los demás, viven más...).

–¿Qué papel cree que juega la tecnología en nuestras vidas actuales?

–Es imposible negar el impacto de la tecnología en nuestras vidas. Pasamos de media entre 2 y 4 horas ante el móvil, recibimos continuas noticias (ciertas y falsas) por todo tipo de medios tecnológicos... Estamos en un mundo digital. Y los nacidos después de 1990 están más expuestos que los nacidos en los años 1960 y 1970. Si me gustaría apuntar que curiosamente hay un estudio sobre los dos hábitos que más aumentan la esperanza de vida y que más felicidad dan. Y no tienen nada que ver con las nuevas tecnologías. El primero es vivir al lado de alguien que te quiera. El segundo, llevar una vida social activa. Creo que estamos utilizando las nuevas tecnologías para seguir relacionándonos con los demás, buscando ser queridos (solo hace falta ver cómo buscamos los 'likes').

–¿Cree que las redes sociales obligan a los establecimiento turísticos a reinventar su forma de mostrarse al mundo?

–Sin lugar a dudas. No soy la persona adecuada para hablar de este tema (no es mi especialidad) y no soy nativo digital. Pero como usuario he cambiado totalmente la forma de organizar mis vacaciones, elegir los establecimientos turísticos, valorar y expresar mis opiniones sobre los mismos, contratar los medios de transporte…

–¿Qué recomendaciones sobre motivación empresarial le daría a un pequeño establecimiento turístico de Cantabria?

–Las mismas que doy a todos los empresarios:

1. Desarrollar el coeficiente de Optimismo: entendido como la necesidad de hacernos responsables de nuestra propia vida, buscando tener un foco de control interno que nos impulse, ante cualquier contratiempo, a plantearnos el presente y no el pasado. Preguntarnos qué se puede hacer y no quién ha sido. A enfocar el presente que depende de nosotros y se puede cambiar y no el pasado que no se puede modificar.

2. Tener pasión por la vida: solo podemos tener éxito si hacemos cosas que nos motiven y apasionen.

3. Trabajar duro: No hay éxito sin esfuerzo. La felicidad no está en «no hacer nada y descansar». La felicidad reside en trabajar duro y apasionadamente en retos.

4. Desarrollar la capacidad de resiliencia: no rendirse nunca.

5. Estudiar y tener los conocimientos adecuados: Tenemos que conocer y estudiar nuestro sector y negocio. Disculpen la broma, no sirve el «tonto motivado».

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