Secciones
Servicios
Destacamos
Adiós a la etapa de dinero barato que venía marcando la economía desde hace prácticamente ocho años. Después de varios conatos, el euríbor se ha instalado en positivo en la que es la mayor referencia desde el año 2015: ayer se disparó hasta el 0, ... 084%. La cifra aún es mínima, muy próxima al 0%, pero implica un avance de 0,06 puntos más que el jueves y un nuevo máximo diario desde hace más de seis años.
De hecho, el diferencial actual del euríbor frente al mínimo histórico que marcó hace apenas cuatro meses, el pasado mes de diciembre, ha supuesto un cambio de tendencia. De cerrar en aquel momento en el -0,51% a aproximarse ahora a la media del 0% en abril, a falta de una semana para que concluya este mes.
Este movimiento refleja, o más bien anticipa, las advertencias lanzadas por varios miembros del Banco Central Europeo (BCE) en las últimas semanas. El último en hacerlo fue este mismo jueves su vicepresidente, Luis de Guindos, quien abogó por que, si fuera necesario, la política monetaria restrictiva inicie su andadura mejor más pronto que tarde. «Teóricamente todo es posible», respondía el exministro de Economía al ser preguntado por la posibilidad de que el BCE acometa su primera subida de los tipos de interés en julio. «Desde la perspectiva de hoy, julio es posible y más tarde también es posible», insistía.
Ayer mismo, la presidenta de la institución, Christine Lagarde, señalaba por primera vez y de forma clara la «gran probabilidad» de que los tipos suban antes de que finalice el año. En cualquier caso, y a la espera de que se tome esa decisión, también ha solicitado a los miembros del Consejo de Gobierno que se guarden de expresar a los medios sus opiniones sobre política monetaria al menos unos días después de cada reunión, según varias fuentes.
Las posturas de los distintos miembros del Banco Central Europeo difieren de la decisión adoptada en la cita del pasado 14 de abril, cuando la institución decidió acelerar al final del tercer trimestre el final de las compras netas de deuda pero sin precisar cuándo llegaría el alza de tipos.
La consecuencia directa de esta nueva política monetaria que está por venir tendrá su impacto en las hipotecas. O mejor dicho, en las cuotas de esos créditos que pagarán los ciudadanos.
Los últimos datos disponibles en las estadísticas de la Asociación Hipotecaria Española (AHE) indican que el saldo vivo (conjunto de hipotecas en vigor) de préstamos ligados al euríbor asciende a aproximadamente unos 455.500 millones de euros.
De esta forma, con un alza del índice como el actual, que ha subido aproximadamente medio punto porcentual en el último año, puede suponer un incremento de las cuotas hipotecarias que se situaría entre los 170 y los 350 euros al año. Es decir, entre 14 y 29 euros al mes. La cuantía final siempre dependerá del calendario de revisión de cada hipoteca y del diferencial que tenga comprometido cada ciudadano con su banco, así como del tipo de crédito, si es fijo o variable.
A pesar de que las hipotecas a tipo fijo han venido ganando más adeptos durante los últimos años, las variables representan la mayoría. Eso sí, las nuevas que se van constituyendo eran mucho más proclives a cuotas fijas: el 70% de las firmadas son fijas y el 30%, variables.
Un primer cambio ya se deja notar en los bancos: el tipo medio al que las entidades concedieron créditos para hipotecas en marzo fue del 1,513%, frente al 1,481% de febrero, según los datos del Banco de España.
De esta forma, vuelve a situarse por encima del nivel de 1,5%, si bien todavía se encuentra por debajo del nivel máximo registrado en los últimos 12 meses, precisamente en marzo de 2021, cuando se observó un tipo medio del 1,571%.
Quienes vayan a hipotecarse en los próximos meses también verán cambios en el mercado hipotecario. La pujanza que han tenido los préstamos para vivienda a tipo fijo previsiblemente se irá diluyendo a medida que los tipos de interés avancen.
La estrategia comercial de la banca comenzará a girar hacia las ofertas en las hipotecas variables, donde el margen que obtengan les resultará más atractivo que hasta ahora, con el euríbor en negativo. Por el contrario, las nuevas fijas incrementarán sus tipos, a medida que ha ido creciendo el coste de la deuda a largo plazo, la referencia de las entidades para marcar el precio de las hipotecas que venden.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.