Días de vino y espinas

Un rótulo amarillo colocado justo al lado del 'play' nos informa: «Advertencia: lenguaje explícito». Pero es un aviso inocente. Lo más suave de ese vídeo son los tacos. Lo más triste, el estado lamentable en que se ve a Johnny Depp de buena mañana. Ataviado con un sombrero negro de pirata, una camisa vaquera y gafas de sol (dentro de su propia casa), el actor aparece en pleno ataque de ira en la cocina, arreándole patadas a su microondas al grito de '¡motherfucker!' y golpeando con violencia las puertas de los armarios en busca de algo...

Amber Heard, su pareja, que tuvo el cuajo de grabar la escena con su teléfono móvil, le recuerda suavemente que esa mañana no ha pasado nada para que él se ponga así. «Me he despertado y tú estabas amable. Ni siquiera hemos discutido», le dice (como si una discusión bastara para justificar semejante arrebato). Él se limita a seguir dando golpes, repitiendo las palabras de su mujer lentamente y de forma inconexa, como si estuviera colocado. Luego procede a vaciar media botella de vino tinto en un copón gigantesco, mientras farfulla algo como «Tú estás loca» y cuando Heard le pregunta si ese va a ser su desayuno él se abalanza sobre ella, le estrella la copa de vino, intenta arrebatarle el móvil y ahí se detiene la imagen.

Depp, sobre quien pesa una orden de alejamiento tras ser denunciado por malos tratos, no ha negado los hechos, pero su entorno acusa a Heard de «haber editado el vídeo». De hecho, no será admitido por el tribunal como prueba durante el proceso de divorcio porque fue grabado sin el consentimiento del actor. Sin embargo, el daño a la imagen del ya de por sí extravagante astro hollywoodiense es innegable. El vídeo no solo demuestra que se levanta de la cama con peores intenciones que la pirómana de Galicia, sino que además es un tipo violento que probablemente nunca ha superado del todo esa adicción a las drogas y al alcohol que él mismo confesó en su día a la revista 'Rolling Stone'.

En el lado opuesto, Vanessa Paradis, que ha convivido 14 años con él, le defiende. La actriz francesa ha dejado muy claro que ella no cree a Heard y está dispuesta a testificar en los tribunales a favor del padre de sus dos hijos. Bien es cierto que Depp se casó con Heard sin contrato prenupcial y hay una fortuna en juego (el actor ganó el año pasado 30 millones de euros). Otros 23 espontáneos están dispuestos a blandir su espada por el honor del capitán Sparrow... Heard, en cambio, cuenta solo con siete testigos.

Johnny Depp, de 53 años, conoció a Amber Heard, de 30, durante el rodaje de la película 'Los diarios del ron', un film cuya trama está marcada por el alcohol. Se casaron en la isla que posee el actor en las Bahamas y hay quien asegura que a los tres meses ya se habían dado cuenta del error, pero que se concedieron un año de prórroga «para no hacer el ridículo». Ahora ese triste vídeo doméstico viene a descorrer el telón mostrando los días de vino y espinas que ambos compartieron.