Desactivan una bomba de la Segunda Guerra Mundial de 250 kilos en Berlín

Las autoridades decidieron desactivarla este domingo al tratarse de una jornada en la que la gran mayoría de los comercios se encuentran cerrados, al igual que colegios, guarderías y oficinas. Más complicada resultó la evacuación este sábado del Hospital Judío, cuyos pacientes, entre ellos los aislados en una planta para enfermos de covid-19, fueron trasladados a otros centros de la capital. El tráfico de los tranvías y la línea de metro que pasa por la zona fue suspendido preventivamente, mientras los propietarios retiraron sus vehículos aparcados en las calles cercanas. Más de 400 policías comprobaron que los edificios en un radio de unos 500 metros en torno a lugar del hallazgo se encontraban vacíos tras visitar puerta por puerta todos los domicilios. Los portales evacuados fueron marcados por los agentes con aerosoles de tiza.

Efectivos de los bomberos y voluntarios de la Cruz Roja con ambulancias y vehículos especiales ayudaron a abandonar sus hogares a ancianos y personas impedidas o enfermas, mientras los artificieros de la policía berlinesa se preparaban para la desactivación de la bomba, que desde su descubrimiento se encontraba cubierta por un enorme colchón de agua con el fin de mitigar una posible detonación espontánea. El artefacto se encontraba ya desenterrado a tres metros bajo la superficie y los especialistas retiraron los últimos restos de tierra que lo cubrían con sus propias manos para proceder a desmontar su detonador. Una vez desactivada, la bomba fue trasladada seguidamente al centro de eliminación de explosivos de los artificieros de Berlín en Grunewald, un barrio con un gran bosque donde ese tipo de operaciones se realizan en una zona aislada y fuera de peligro para la población.

Cientos de bombas aéreas y toneladas de todo tipo de munición han sido desactivadas en la capital alemana en las últimas décadas. Las autoridades calculan que hasta 4.000 artefactos de gran volumen se encuentran aún sin desactivar bajo la superficie de Berlín. En 2020 se localizaron y desactivaron ocho bombas pesadas en distintos barrios de Berlín. La bomba desactivada este domingo no es de las mayores. Los artificieros berlineses han inutilizado artefactos de 500 kilos y hasta 1 tonelada. La mayor bomba aérea desactivada hasta ahora en Alemania pesaba 5.000 kilos y fue retirada con éxito en la isla de Helgoland, en el Mar del Norte. La experiencia de los artificieros y la precaución de las empresas de excavación y sus operarios hacen que los accidentes sean muy infrecuentes.

Sin embargo, el pasado 1 de diciembre varias personas resultaron heridas al detonar una bomba aérea de 250 kilos en Múnich cuando se realizaban perforaciones para la construcción de un nuevo puente ferroviario. El último accidente mortal se registró en junio de 2010 en la localidad de Gotinga. Tres artificieros resultaron muertos, dos personas gravemente heridas y otras cuatro con heridas leves al detonar espontáneamente y una hora antes de su desactivación prevista una bomba aérea de 500 kilogramos. Ese tipo de artefactos son desactivados normalmente en el mismo lugar del hallazgo. En casos aislados y cuando los posibles daños pueden ser determinados previamente se procede a la explosión controlada de la bomba o se traslada a un lugar seguro para su detonación.