Secciones
Servicios
Destacamos
Ciudadanos afronta su campaña más difícil. Con todas las encuestas augurando un descalabro en las urnas, en las que podrían perder hasta cuarenta escaños, Albert Rivera se echará mañana a la carretera para intentar movilizar a los 2,5 millones de votantes que eligieron la ... papeleta naranja en abril y ahora dudan si volverlo a hacer. El líder de los liberales priorizará Andalucía, Cataluña y Madrid, sus principales feudos, en los que tratará de amarrar a su electorado bajo la consigna de que 'Sí se puede', el popular eslogan con el que Barack Obama llegó a la Casa Blanca y que Podemos ya ha utilizado en el pasado. «Sí se puede cambiar un Gobierno, sí se puede sacar a España del bloqueo y sí se puede poner en marcha reformas», aseveran en la dirección.
Será una campaña centrada en el candidato y no en las siglas del partido, para recuperar la idea de movimiento cívico con el que Ciudadanos nació en Barcelona hace trece años. En las filas liberales insisten en que Rivera sigue siendo su «principal activo» y de los políticos mejor valorados dentro y fuera de la formación y a él fían su remontada. Aunque en la cúpula naranja reconocen que siguen por debajo de los resultados del 28-A, aseguran que las cifras que manejan están por encima de la mayoría de los sondeos que vaticinan el 10-N un desplome por debajo de la veintena de diputados.
En estos momentos, las encuestas que manejan Rivera y su círculo colocan a Ciudadanos en tercera posición empatado con Unidas Podemos y por delante de Vox. En todo caso, ninguno de sus sondeos les sitúa por debajo del 11% del voto. Es más, fuentes del partido señalan que hay una tendencia ascendente que se va acelerando día a día, en parte gracias a las últimas apariciones televisivas de Rivera. «La movilización es nuestro principal desafío», reconocen desde el comité electoral.
Con este reto, Rivera abrirá la campaña este jueves en Cádiz, cuna del liberalismo, y la cerrará el 8 de noviembre en Barcelona, con la crisis catalana como telón de fondo y en la víspera de nuevas movilizaciones convocadas por los Comités de Defensa de la República. Además, el candidato naranja visitará Málaga, Madrid, Valencia, Sevilla, además de una ciudad de Castilla y León y otra de Extremadura aún por definir.
Según explican desde Ciudadanos, en esta contienda huirán de los mítines clásicos, que serán sustituidos por actos más cercanos y reuniones con colectivos, en los que se eliminarán las «barreras» entre Rivera y el público para «buscar una imagen de cercanía».
Andalucía jugará un papel relevante en la campaña. Además de ser la primera comunidad donde los liberales se estrenaron en el gobierno, reparte 61 de los 350 escaños que tiene el Congreso y su barrera electoral es bastante baja, del 3%. De ese modo, cada voto cuenta a la hora de asignar los últimos diputados en las circunscripciones andaluzas, donde Sevilla, Cádiz, Granada y Málaga son las cuatro provincias con más escaños.
La crisis en Cataluña y la falta de contundencia del Ejecutivo de Pedro Sánchez para frenar el desafío soberanista es otra de las bazas con las que Rivera confía en frenar la sangría de votos. Y que, con toda seguridad, el líder naranja introducirá en el debate electoral a cinco del próximo lunes, en el que Ciudadanos tiene puestas todas sus esperanzas para no acabar siendo un partido residual con un futuro incierto.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.