Un apasionado del trabajo, el ciclismo, la política y las ONG's

Quiso ser chapista y dedicarse más al ciclismo, pero su destino era levantar su propia empresa. Una misión en la que contó con ayuda de personas a las que siempre estuvo agradecido.

Pionero en la importación de la anchoa, en 1973 fundó su empresa en Espinosa de los Monteros, y 20 años más tarde se estableció en Colindres. «Entre nieve y aire puro, las anchoas 'Santisteban' tienen sabor a jamón», escribió JJ Benitez en la Gaceta del Norte.

Geli empleaba 16 horas al día a su trabajo. Recorría España con la familia a cuestas buscando clientes, llamando puerta a puerta con tenacidad y confianza en su sueño.

Hombre fuerte y deportista, entusiasta de los bolos y del Rácing, el ciclismo fue su gran pasión, donde destacó en todas sus facetas organizativas. Impulsó pruebas y fue vicepresidente federativo. Creó los equipos 'Rutier', cantera de profesionales de los míticos ONCE o Teka. «Era como un segundo padre» decían quienes fueron 'sus ciclistas'.

Si hablamos de política, 'Geli' se implicó en los primeros latidos de la democracia. Una faceta que fue para él motivo para charlar, provocar y polemizar como un juego.

Geli era fuerza, trabajo, energía, lealtad, generosidad, optimismo, simpatía, provocación y picardía. Otra faceta nada desdeñable fue su vocación altruista y solidaria con ONG's e instituciones religiosas.

Geli sin Pilar, no hubiera sido él. Seguramente si la hubiera hecho caso en alguna que otra ocasión, algunas cosas hoy serían distintas; pero así era él, un alma y un espíritu LIBRE. Agradecido siempre y teniendo presente a tantos y tantos que pasaron por su vida.