Nos dejó un amante de su familia, Pedreña y los coches

Una reflexión que no he olvidado y que cada día que pasa estoy más convencido de que es una gran verdad.

El fallecimiento de un amigo siempre es duro, y a nivel personal, el fallecimiento de Jaime me ha descolocado por completo, ya que apenas 12 horas antes habíamos estado hablando por whatsapp en un grupo que tenemos junto con otros dos buenos amigos, Luis Pla y Serafin Vaz. En esa conversación nos contaba lo que estaba disfrutando junto con Aurora de unas vacaciones en Miami visitando a unos familiares. El destino ha querido que nos dejara tan lejos de su querida Pedreña, localidad a la que llegó cuando se casaba con Aurora. Pedreña, de la que Jaime siempre hablaba con la boca grande y por la que trabajó como alcalde pedáneo y ejerciendo también de concejal de Deportes en el Ayuntamiento de Marina de Cudeyo.

Son muchos los amigos que durante estos días se han interesado por Jaime, amigos de las carreras, donde destacó desde finales de los años 70, en los que sentado a la derecha de Manolo Cabo ambos eran claros favoritos en todas las pruebas en las que participaban. Jaime también compitió junto a Luis Pla un par de temporadas, así como alguna carrera aislada con otros pilotos, como con su hermano Paco con el GT Turbo cuando éste comenzaba a competir. Sus últimas carreras las compartió con su amigo Serafo en pruebas de regularidad y con el propio Luis Pla en un Rally Festival Trasmiera. No hay que olvidar su gran afición al juego de la flor, que le pemitió disputar importantes campeonatros por toda la región.

Jaime, nos ha quedado pendiente esa comida donde 'Peto' en Puentenansa que llevábamos hace tiempo retrasando. Esas largas sobremesas junto a Luis, Serafo y nuestras mujeres en las que tan buenos ratos hemos pasado recordando anécdotas de aquellos rallies que todos vivimos y que fueron tan especiales, celebrando a su vez los muchos años de amistad que ya sumamos, siendo en momentos como este cuando mas se valora esa amistad sincera y duradera. El pasado sábado tuvimos la oportunidad de dar un abrazo a Aurora, a tus hijos y al resto de la familia que tanto te echará en falta, y al día siguiente acudimos a tu despedida en la misa funeral que se celebró a las cuatro de la tarde en la parroquia de Pedreña.

Descansa en Paz amigo.

Rosa Inés García

Acertadamente, en el responso ante el féretro de Jaime Gonzalez Oruña, el sacerdote destacó su mentalidad social. El compromiso social de este copiloto de rallies de carreras fue siempre mucho más allá y muy veloz. Fue propio de un piloto de primera defendiendo lo que le llevó a ser un activista del socialismo desde el principio.

Jaime era peleón y bueno; franco y leal; discutidor y reflexivo. Le gustaba correr y ganar la carrera. Y Corrió muchísimo trabajando en su ayuntamiento, Marina de Cudeyo, por los que injustamente viven desfavorecidos. El supo siempre que la libertad viene acompañada de obligaciones morales que nos elevan por encima de nuestros pequeños intereses. Y lo defendió sin miedo.

Jaime González Oruña ganó la carrera, sí. La del amor de los suyos. La del respecto y afecto de los que le conocimos.

Y la de la honradez que perdurará con su memoria.