Es difícil hacerlo peor

Ha pasado ya una semana de enero y los aficionados y, sobre todo el cuerpo técnico, no tienen nada que llevarse a la boca. Desde el primer mes de competición era ya un clamor que la plantilla era una patata. Que se habían fichado jugadores que están acabados y que otros que han llegado no dan el nivel para Segunda. Y sobre todo, desde hace mucho tiempo saben hasta en las Islas del Mar de Coral que este equipo necesita un delantero. El club ha tenido tres meses para planificar los cambios y adelantar el trabajo, pero por ahora no hay nada.

¿Qué demonios ha estado haciendo el director deportivo todo este tiempo? ¿Lo mejor que ofrece el mercado es un defensa suplente del Castilla que deambula por Segunda B y que ha llegado casi en secreto a Santander? Es raro. Igual que alinear a un chico de Tercera División que ha marcado dos goles en todo el año, mientras se queda en casa otro que es el 'pichichi' de la categoría.

Gente que ha tenido éxito en los negocios como Alfredo Pérez y Pedro Ortiz no pueden permitir que este barco se hunda porque se tomen malas decisiones. El futuro a medio plazo del club depende de lo que se haga en este mercado de invierno y no se pueden volver a equivocar. El Racing es penúltimo, sólo ha ganado dos partidos en la Liga y es evidente que no tiene nivel para mantener la categoría. Febrero está a la vuelta de la esquina y la Segunda B se divisa en el horizonte irremediablemente.