Ni idea

Respecto al tamaño del universo, no está claro, Lutxo, viejo amigo. Al parecer, no debe de ser fácil averiguarlo, le digo. Según el último recuento, hay dos quintillones de galaxias con cien mil millones de estrellas cada una. Pero puede que haya más. Si Isabel ... Díaz Ayuso ha querido nacer aquí y ahora, pues de eso que se han librado en el resto del universo, digo, ¿no te parece? Porque es irrepetible, claro. Y me dice él: pero podrían clonarla. Y sí, por supuesto: estoy seguro de que lo habrán pensado. No obstante, confío en que cabalmente entiendan que con una es más que suficiente, ¿no? De todas formas, Lutxo, en su equipo tienen que estar muy contentos con ella. Siempre gana. Y el hecho de que nosotros no lo entendamos no le quita mérito. Por algo ganará, digo. Y dice Lutxo: Ella no gana. ¿A qué te refieres, Lutxo, viejo canalla anhelante?, le digo. Y me dice: No es Berlusconi, no es Trump, es una actriz. Muy bien enseñada, eso sí. Pero le escriben el guion. Los que ganan son los que están detrás, dice. Y ¿quiénes son esos?, le pregunto. Y me contesta: ¡Ah, yo eso no lo sé! Pues a mí me parece que aquí ya nadie quiere saber nada, le digo. Todas las campañas electorales son humo y más humo. Palabras ardiendo como fuegos artificiales. Como tracas baratas. No hablan de las cosas de las que habría que hablar. Y me pregunta: ¿y qué cosas son esas? Y le digo: pues ya sabes, todos pensamos en las cosas que pensamos todos. Que son las que son. La alimentación, la vivienda, la sanidad, la educación. Y me suelta: ¿Y qué me dices de la cultura de los pueblos? Y no lo sé, claro, no tengo ni idea. Ahí me has pillado, Lutxo, viejo gnomo.