Ahora todos se suben al tren

El Reglamento de la Red Transeuropea de Transporte se estaba gestando en Bruselas desde 2011, pero fue en 2013, cuando la Comisión Europea presentó su propuesta de enmiendas para incluir y apostar por la conexión ferroviaria Santander-Bilbao. Los gobiernos, populares en aquel entonces tanto en Cantabria como en el Estado, estaban en disposición de presentar y presentaron enmiendas, pero no para incluir la conexión Santander-Bilbao en la Red. Según la documentación aportada por la Conferencia de las Regiones Periféricas Marítimas (CRPM), organización europea a la que pertenece Cantabria y que coordinó las enmiendas, solo se apostó por la línea Santander-Valladolid. Ni rastro en estos mapas de la línea que une nuestra capital con la vizcaína.

Tras los cuatro años de gobierno del PP sin subirse al tren, Cantabria se pone en marcha. La oportunidad apareció en 2016, cuando nos incorporamos al Lobby de la CRPM y presionamos para que Cantabria accediera a la red básica. En 2017 se propone la revisión del Mecanismo e incluimos la conexión ferroviaria Santander-Bilbao. Continuamos con enmiendas enviadas a los eurodiputados en 2018, cuando la Comisión Europea había iniciado la revisión del Reglamento prevista para 2023. Estábamos en el lugar adecuado en el momento adecuado. Al año siguiente participamos en la consulta interna de la CRPM y en el anexo que recogía las modificaciones de los mapas, donde estaba de nuevo la línea Santander-Bilbao.

En 2020 se publica un primer documento de trabajo interno sobre la revisión del Reglamento. Volvía a aparecer la conexión Santander-Bilbao. Sabíamos que la Comisión Europea debía presentar su propuesta de revisión del reglamento en diciembre de 2021. Estaba a punto de comenzar el partido en el que teníamos que salir a ganar.

Conscientes de la importancia de gestionar bien los tiempos en Europa, Miguel Ángel Revilla viaja a Bruselas en noviembre de 2021, semanas antes de la presentación de esa propuesta de revisión. Se reúne con europarlamentarios de la Comisión de Transporte, con el gabinete de la Comisaria de Transportes y con el Embajador Representante Permanente ante la UE.

La propuesta de Reglamento se presenta el 14 de diciembre de 2021, la conexión Santander-Bilbao sigue figurando en la Red Global, pero se incluye un nuevo plazo para ejecutar la denominada Red Básica Ampliada, más realista en cuanto a tiempo y, desde ese momento, se convierte en el objetivo de Cantabria.

Muy conscientes de que ahora el partido se jugaba en el Parlamento Europeo y en el Consejo de la UE, elaboramos nuestra enmienda en 2022 y la enviamos a todos los grupos políticos del Parlamento de Cantabria para que incluyeran sus aportaciones. No recibimos ninguna. Enviamos la enmienda a los eurodiputados españoles. Fue presentada y defendida en la Comisión de Transportes del Parlamento Europeo por la eurodiputada Izaskun Bilbao, miembro titular de esa comisión. También la hicimos llegar al Ministerio de Transportes, a la Representación Permanente de España ante la Unión Europea (REPER) y a la comisaria europea de Transportes. Hay que destacar que nuestra enmienda fue la única, dentro de las presentadas por eurodiputados españoles, que iba argumentada.

El pasado mes de diciembre, diputados portavoces de todos los grupos parlamentarios de Cantabria viajan a Bruselas para reunirse con eurodiputados y mostrar su apoyo al tren Santander-Bilbao. En la orientación general de los ministros de Transporte de la UE en diciembre de 2022, no figura la conexión Santander-Bilbao, pese a que la ministra de Transportes española la defendió expresamente. Por ello, Miguel Ángel Revilla consigue que la ministra firme el compromiso financiero del Gobierno de España para este tramo y envía la carta firmada por ambos a la Comisaria de Transportes defendiendo la conexión.

Finalmente, la pasada semana el Parlamento europeo aprobó ampliamente la solicitud de Cantabria para que el tren Santander-Bilbao se incorpore a la Red Básica ampliada, reciba fondos de la UE y esté ejecutado para 2040, diez años antes de lo previsto actualmente. El empuje definitivo para conseguirlo será la Presidencia española de la UE en el segundo semestre de este año, cuando está previsto que Parlamento y Consejo europeos tomen la decisión.

Más de seis años de trabajo subidos al tren, a ese que el PP decidió no coger. Llegamos a tiempo porque nos subimos en el momento en el que se volvió a presentar la oportunidad. Sin titubeos, sin medias tintas, sin escondernos en el apoyo y en la crítica al mismo tiempo, como hacen otros.

Termino con una reflexión. Dicen que, en la vida, cuando quieres cambiar de destino, hay que subirse al tren. Tras ocho años sin un lugar claro en la política regional, con guerras internas y mandatos de Madrid en los que unos días te apartan y otros te dejan estar, es normal agarrarse a cualquier tren que pase por delante. Hay que aferrarse a algo, a otro intento desesperado, y van tres por parte del PP, pero lo real, lo efectivo, es que Cantabria ha conseguido subirse al tren.