Piedras del silencio

Las fotos (14) son de Gerardo Hernández Nevado, en un tono templado que intencionadamente se acerca al bitono, al bicromo, con bordes difuminados. Tan hábil fotógrafo ha huido adrede del colorín, del que usan y abusan los amigos del relumbrón. Cámara en mano, el fotero ha centrado su enfoque tras allá de la cordillera cantábrica, captando motivos que más que ruinas de un paisaje son la huella de un paisaje en ruinas, remembranza de un esplendor que pertenece al definitivo tiempo de lo que el viento se llevó.

He aquí el elenco de láminas. Cantabria: Las Rozas, embalse del Ebro. Palencia: Puente Medieval, embalse de Aguilar. Embalse de Aguilar. Tablada de Rudrón. Villavega de Aguilar. Becerril de Campo. Antiguo Molino Hidráulico. Burgos: Desfiladero de los Tornos. Aylanes. Valle de Zamanzas. Manzanedillo, valle de Manzanedo. Rebolledo de la Torre. Catorce preciosas láminas que rinden tributo de admiración y respeto a las tierras hermanas del sur regional.

A los burgaleses y palentinos, tantos y tan queridos, hoy avecindados en Cantabria sin duda alguna les traerá muchos y gratos recuerdos el repertorio de imágenes; que, como tan certeramente expresa el pensamiento de Leonardo, tuvieron vida y fenecieron. Sólo para la vida, que es transito hacia la insondable nada. Porque para el arte (en este caso, fotográfico) son inmortales.